viernes, 1 de septiembre de 2017

Velortos de caridad


Presumir de anchuras destapa la fisura de nuestras estrecheces.
Loros que comen cacahuetes y pregonan comer caviar.
Es cuestión de pocos huevos y de confundir las huevas.
Casas altas de lóbregas bodegas.
En la alcoba de la partera nacen los velortos.
Se envara la bastarda con las arracadas prestadas de la traicionada señora.
Servir para fingir, fingir que no se ha servido.
Vida fruto del vicio y de la caridad del sencillo.
Sencillamente se conduce el llano.
Más lo escabroso que nació torcido, habla de finuras y del llano abolengo que nunca tuvo.
Era de los martires, martires de la apariencia.
Criollas de quincalla que nada brillan, sino de pacotilla.
Cree el escuerzo en su osadía, que tapa el circo su pringue de sin valentia.
Frutos de querindonga que a la puerta de la iglesia esperan mancebía.

No hay comentarios:

Publicar un comentario