viernes, 7 de junio de 2013

Otear

Ausencia de presencia.
Presencia de ausencia.
Sigilo en el páramo sin ruido.
Prodigo vuelvo y ya no hay nadie.
No estuve para defender y ahora vuelvo a buscar defensa.
Si derrochas tienes todas las puertas abiertas.
Si escatimas y racaneas, no por carácter si no por ruina, todos se cierran.
¿Para que otear el vació.?
¿Para ver el vació del confín.?
Cigarra a las puertas del invierno.

Remordimiento

Será el nuevo líder el que sustituyendo al viejo linaje, intente rememorar el imperio.
Tirano que tirara del bocado encabritando al corcel.
En tus manos todo se aglutina.
El ordeno y el mando.
Necesaria etapa, tras los viciantes prolegómenos y las cuadrillas de parásitos.
Es imposible enmendar la plana hoy pero mañana la firmeza otra cosa dirá.
Que culpa tiene quien quiere de nuevo alcanzar la gloria del águila de San Juan, de los cinco reinos y ultramar.

jueves, 6 de junio de 2013

Río revuelto

Serán los que mejor se fajen, los que mejor engañen en las alharacas de la propaganda.
Lacra alojada en el noble y crédulo corazón.
No los escuchéis porque son capaces de convenceros.
Tienen púlpito para difundir sus mentiras.
Y calan hondo en el desarraigo del momento.
Ruido de sables para enfervorecer desnutridos.
Nada pierde quien el rió revuelve.
Todo esta inventado.
Todo esta ya vivido.
Antes otros con estas estrategias ya se han enriquecido.

Entrelazadas iniciales

Entre los macizos de calas.
En el estanque dorado.
Junto al bosque que fue el laberinto.
Y donde ya es imposible perderse por impenetrable.
He estado allí.
Intentando ver en el fondo las entrelazadas iniciales.
Esas que marcan todas las mañanas mis mejillas, recordándome en el amanecer tu ausencia.
Nuestras promesas son hoy verdes limarones.
Compañías efímeras.
Campañas efímeras.
Caminos en soledad y en compañía.
Naturaleza que un día domamos y hoy vuelve a ser salvaje.

Nubes negras

En el desierto de torres desmochadas y guerras de condados.
Agoniza en los graves síntomas.
¿ Quien tipificara con claridad la enfermedad.?
Ranas que ansían ser príncipes.
Príncipes que los batracios enlodan para que el ojo del necio solo vea ranas.
Nubes negras que ennegrecen el firmamento de España.

Quien no teme....

La nueva miseria.
La miseria moral.
La nueva degradación.
La degradación del alma.
Sin humanidad.
Deshumanizados.
En el frío amanecer de los mañanas extraños.
Sin fe.
Sin muertos.
Sin temor.
Quien no teme fácilmente hierra.

También de rosas

No solo vive el hombre de pan, también vive de rosas.
Son las bagatelas las que alegran el alma.
El salario, el aplauso y las palabras de animo.
Hasta un perro muere sin caricias.
Las fuerzas que uno tiene para vivir son las fuerzas que uno tiene para perseguir el amor.
Rosas de caricias.
Pétalos de abrazos.
Salario de besos.
Aplausos de animo.

miércoles, 5 de junio de 2013

Clientelismo

Redes de favores.
Favores para las redes echar.
Formas de pescar.
Una de las forma de las bocas de los comprados cerrar.
Clientelismo.
Red clientelar.

Libelistas

El vicio es una escalada que no tiene cúspide.
Libelistas a sueldo de uno y otro bando.
Bosque de verticales calumnias.
A vuestros pies la verdad ni reverdece.
Fagocitas pureza con la indolencia de los curtidos verdugos.

Si yo puedo también

Día tras día me repito que la venganza es inútil y que intente ser feliz.
Pero siento también que me equivoco al reprobar mi leit motiv.
Si hacer justicia me hace feliz, porque razón debo dejar sin castigo un crimen.
Construyo más allá del valle de lagrimas, aunque camino en el.
Veo sus manos manchadas de sangre inocente todos los días, recordándome su atroz crimen.
En el otro mundo pagará, pero en este si yo puedo también.

Hambre de amor

Hay un camino, que serpentea muy poco y va directo a la cúspide.
Es el hambre la que crea esta vereda sin hierva y tan transitada.
Hambre de amor.
Por el camino del sexo acederas al poder y podrás llevar a cabo el magnicidio.
Quien tu ya sabes que dio la orden tiene necesidades y a través de de ellas las tuyas vas a satisfacer.

martes, 4 de junio de 2013

Rocambolesco fin

Soy un animal aterrado hondeando la bandera de sangre.
El altivo orgullo de los necios.
Enfrascado en las miseras valías. 
Buscaré la luz dorada del corazón de oro.
El que no exige tributos, ni sacrificios, ni privaciones.
Cabalgo en la claridad crepuscular a lomos de la tristeza.
Cuando llegará el fogonazo que me desapee.
Será antes de que nos aniquilen.
La gloria del último estertor.
Ráfaga refulgente de verdad.
El tiempo en el postrimero instante lo cura todo.
Melancólico y rocambolesco fin.

Nos diluimos

Luna en la noche menguante.
Una hoz afilada y cortante.
Rendido en el cálido sopor del lecho.
Hundido en la invasión sin techo.
Aculturado.
Colonización silenciosa.
Algarada de salmos y brillos exóticos que borra lo propio.
Nos diluimos como un terrón en un estanque.
Que quedará de nuestra laboriosa entelequia.
Rendidos en el silencio, en el paso lento.
Sin linajes, sin casas.
Ya todo lo hemos vendido, el oro , los palacios, los tesoros.
Y denostamos al más auténtico de los auténticos, denostamos a nuestro Dios.

Heredad de pecado

El dolor mantiene despierta la mente.
Dichosos los que sufren, porque con dolor cambiaran el mundo.
Heredad de pecado.
Salón de vicios y aires infectos.

Sol rasante

Me ciega el sol rasante del amanecer.
Los arraigados vicios.
Los desarraigados valores.
¿Como volver a arraigar.?
¿Como desarraigar.?
Sin descanso me tiene mi pensamiento.
En los andenes del retorno.
Bienaventurados los necios que no tenéis talento porque nada tenéis que rendir a Dios.
Lenguas de fuego, don de lenguas.
El cilicio me recuerda con su dolor que tengo que darlo todo por los que sufren.