domingo, 24 de agosto de 2014

Mentir

Mentir es como empezar a caminar.
Una vez que se aprende no se para.
Es rentable en el artificio.
Las mentiras tejen una red tan densa, que termina asfixiando.
De tanto mentir y repetir mentiras, ya no sé lo que he vivido, ni quien soy.

Envuelto en seda

No roza el hierro envuelto en seda.
Pétrea alma cobijada tras la suave piel.
Frágiles envases de vidrio que encierran potentes venenos.
Es tan agradable la piel del cordero.
Como la piel con la que engaña el lobo.

Alfombras rojas

Hay vida más allá de las alfombras rojas.
Es tan falso lo que sobre ellas deambula.
Cuerpos enfundados en trajes prestados.
Envarados llenos de prestancia.
Trayectos corto entre senderos de grava.
Nadie vive pisando solo alfombra.
Nadie debería envidiar tan cortos trayectos.

No hay cal sin arena

Hoy estoy llorando, mañana reiré.
No es una promesa que me hago a mi mismo.
El el caprichoso bucle de la vida.
El caprichoso bucle que no da cal sin arena.
Mañana tras la risa, lloraré.

el HOMBRE el animal más VIL

Todo lo que deja cicatriz es una agresión perenne.
Lo escrito, escrito está.
Las cicatrices son torturador daño pasado, futuro y presente.
Creo sin fisuras que el HOMBRE es el animal más VIL.

Más allá del rostro

Hay cicatrices que van más allá del rostro.
Son cicatrices del monstruo, que tras la caricia, te destroza la vida y el corazón.
No solo es el estrago del árbol calcinado.
Es el estrago de la ausencia de la risa de sus pájaros.

El amor no es ACIDO


Cuando el amor decide calcinar la belleza.
Destruir el templo para aniquilar el alma.
Mostrar su poder con la huracanada maldad.
Solo la mano cercana hace tales estragos.
Ácidos besos de posesión que queman la piel.
Amores que deciden por dominio convertir la belleza en algo grotesco.
Pero tras el rostro herido sonríe la inocencia.
Porque hay reinos que no son de este mundo.
Porque hay gemas que no se pueden poseer.
El hombre que por amor arrasa, ni es hombre, ni siente amor.


sábado, 23 de agosto de 2014

La luz de Dios

Desgraciados los que están convencidos de que van sobrados de luz.
Y niegan que también poseen luz los demás.
El Cesar tiene luz, pero tiene mucha más luz el denostado Dios.

El instinto

Cual es la receta para adivinar la verdad.
Exquisita educación que tan tempranamente nos enseñas a mentir.
Será el instinto el único cauce.
Abandonándome a él, podre intuir el desorden que esconde tu fachada de orden.

Resbalar

En ninguna corriente nado.
No nado en ninguna corriente.
Resbalar es un instante.
Nunca resbalar es un estado permanente.

El ciego torrente

Para levantar el puño, un camarada te tiene que haber tirado previamente a los ojos un puñado de sal.
Ojos dolidos, enfurecidos y enardecidos.
Corriente de ceguera, aglutinada en la visión sesgada.
Mundo de miradas de sal.
Saldrá la marea cegada en el alarido de cuartel a arrasar los cauces preexistentes.
Cauces que sirvieron para embalsar el ciego torrente.

El pajar de azucar

Pierdo alfileres sin hilo en el pajar de azúcar.
Hago naufragar palabras punzantes en los mares de miel.
Endulzo sinsabores con exquisita destreza.
Bajo una dura costra de caramelo protejo mi alma.
Más capto el amargor a pesar de tanto artificial dulzor.

viernes, 22 de agosto de 2014

A mi no me coge quien yo no quiero

Como voy a desear yacer al lado del agresor de mi mansedumbre.
Soy muy feliz en la distancia.
Lejos de las manos que aun lavadas y perfumadas siguen oliendo a sangre.
El entierro de mi amor ya no es secreto.
Lo que llore con su muerte tampoco.
Si quiero algo lo cojo.
Pero a mi no me coge quien yo no quiero.
No es talento mi presente, es solo valor.

Deprisa

Vivimos tan aquerosamente deprisa, que nuestras cunetas están llenas de cadáveres.
Mañana nosotros seremos uno de esos cadáveres.
Victimas de un desapego institucionalizado.
Que solo cuida las frases. 
Frases correctas y huecas que vibran lesivas en el frío aire.

Sé quien me va a llorar

" Yo, ya me he muerto y sé quien me ha llorado. "

El olvido es la peor de las muertes y llega en vida.
La vejez es descuido y olvido.
Y en la presencia y la ausencia de los llamados queridos, en esa última etapa, se mide quien te va a llorar.