Niños pobres, pobres niños, que enseñáis a ladrar antes que a hablar.
Azuzados por arpías orondas gruñen y berrean.
Nada doma a una rastrera ralea.
¿ Como incardinar lo que esta ya desbocado y fuera de corriente.?
Es el tiempo de jugar a la guerra sucia, vuestra única guerra.
Es más fácil mover una montaña, que mudar vuestra zafiedad.
Gestos de balcón para por vuestro vulgo ser aplaudidos.
Arengas fáciles.
Condenado en publico, con escarnio y dolo.
Mudas son las malas obras, no hay palabras para tapar tu crimen.
Repartiré lo que no es mio, botín que expoliaré y ni una gota de sudor me ha costado.
Ametralladora de palabras, sin hilo, sin tino, con mucho, mucho ruido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario