Orgulloso de no dar escusas.
Orgulloso de no justificarme.
Orgulloso de no vivir el infierno de fingir.
Orgulloso de que generaciones fuertes hayan logrado para mi la naturalidad, la calma.
El ser, con soltura y sin miedo, excéntrico.
¿Quién hizo dioses a algunos hombres? Para denostar, tildar y perseguir tendencias a la luz del sol.
Sí, a la luz del sol, porque a oscuras son muchos los adoradores del miembro erecto.
Dobleces de siglo XXI.
Cómo se complica la vida el mundo, intentando enmendar la plana a lo que da natura.
Sí, estoy muy orgulloso de ser maricón, guapo e inteligente.
Bravo por los que se enfrentan al mundo, con una pluma, con un tacón o con un físico esculpido en un quirófano.
Nada por orgullo ya temo y quien sienta temor debería mirar en el interior de su aprisco, porque en el está la zorra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario