Hoy todo es grande.
Hoy todo se arremolina, se amontona.
Suma de nucientes, suma de intereses.
La casa grande, el gran burdel.
Amigos de lo ajeno y del grito de guerra.
Intercambiadores de cromos.
Generales de la gran hecatombe, de la gran masacre, de la gran guerra.
Ruido de bajos oficios de ansiosos oficiales.
Ríos sin caudal, pero muy revueltos.
No es la escorrentía lo que en ellos temo, sino lo infecto de la suma de todos sus turbios caudales.
Fulanas que hieden a bajeza a pesar de los enjuagues.
Unas con sangre en las manos y otras con crímenes en los cajones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario