Hoy me he levantado empapado de fe, de fe en el hombre.
No como especie global, pero sí como campo que entre mucha cizaña da libérrimos frutos.
Mis iguales que han nacido esparcidos por el mundo, por los confines del campo, entre áspera y urticante maleza, pero ahí están gritando como yo, con fe para poder localizarnos, tocarnos y darnos el calor necesario para sentir que merece la pena vivir............
No hay comentarios:
Publicar un comentario