Son juegos inútiles de damas bobas.
De bobalicones que con embeleso siguen la bola.
Catedrales de la desesperación.
Anfiteatros desesperantes.
Tiempos de gladiadores.
De condotieros y mercaderes.
Todo se vende.
Y hoy vende mucho la televisada caridad.
Caridad de oficio.
Oficiantes que cobran caras sus actuaciones en el escaparate de la caridad.
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