jueves, 29 de junio de 2017

Ahogos de confaloniero


Peso placentero, presión salvífica, ahogos de confaloniero.
Todos los estandartes tienen su peso y los pendones su arrastre.
Nada es fácil, y con frecuencia el camino más difícil es el más fácil.
Estrecheces derivadas de la holgura.
Bonanza que nos endeuda, generando mil angosturas.
Brillos que repentinamente se orinan.
Transparencias que en un abrir y cerrar de ojos se opacan.
Pacatos entorno a la mesa, sentado frente a los pacatos.
Somos lo que parecemos, somos el fallido intento de aparentar.
Alta gradación etílica en los eruptos de los papos agrios.
Beoda es la envidia, y toda su corte de chancros.

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