miércoles, 2 de abril de 2014

Allí no hay bandos, son todos rendidos

Es en la próxima eternidad donde te espero.
Es en la inacción del más allá donde te veré.
Está a la vuelta de la esquina.
Está en la orilla de la que no se vuelve.
Allí no hay bandos, son todos rendidos.
Allí no hay pleitos, están todos perdidos.
Se van los segundos, perdidos los primeros.
Primeros inamovibles, estancos.
Ser indómito no alarga la vida, solo acorta la lista de las perdidas.
La lista de los caprichos incumplidos.
La lista de las cuentas, que sabemos que mañana en el adiós, quedarán pendientes.

Perturbar la calma de un estanque

Las ondas no solo llegan a la orilla propia.
Perturbar la calma de un estanque tiene sus contraindicaciones.
Agitar la calle no solo agita la calle, también pone ojo avizor a quien está en la acera.
Acción y reacción son movimientos sincrónicos.

Sin infundadas esperanzas

Volando voy sin carga.
Volando en el orden que nadie entiende.
En la clausura con mis iguales.
Los nutrientes amigos de mi roció.
Raíces de abrazo y cimiento.
Estoy en calma.
Estoy en paz.
Estoy paciente.
Salas henchidas de virulencia.
Sé que os abandone a tiempo.
Sin macula interna he salido del lodazal.
Son pocos los arrepentidos que han llamado a mi puerta.
Son menos aun los que me han besado en mi marcha.
Sin carga, sin deuda, sin infundadas esperanzas.
Nada debe quien nada pide.
Vuela libre el que no tiene ninguna deuda. 

martes, 1 de abril de 2014

Acumular tesoros donde no hay polilla

Rosario de nostalgias.
De negro azabache de añoranza.
De letanías musicadas en latín.
Al calor de la mesa camilla.
En las tempranas noches de invierno.
Cercados por las lluvias.
Recogidos en el acumular tesoros donde no hay polilla.
Donde nos esperarán los queridos.
Los seres amados a los que Dios llamo los primeros.
Recuerdo tan lejano y tan próximo ese tiempo.
Me Consuelo cerrando los ojos en la misma sala y sintiendo que ahora estoy allí.

Aun con miedo

Dentelladas da la obscura noche en mi valentía.
Son las cuitas de las sombras.
Ejércitos seducidos por las negras siluetas.
Amparo de las intrigas.
Menguo en el mundo que no abarco.
En los precipicios que me paralizan.
Abismos que en la ceguera no puedo colegir.
Negrura de barro y charcos.
De resbaladizos caminos que recorro por tu salvación a tientas.
Tu auxilio es mi norte aun con miedo en la noche cerrada.

Nada es mio.

Cierro los ojos para practicar la caridad.
Nada es mio y a pesar de no ser mio todo lo doy.
Vivo de prestado, sin derrochar, sin ahorrar.
Es mi meta el hoy.
Es mi futuro el segundo.
El camino del que me llama.
El derrotero del que me pide ayuda.
Es mi norte no el sacrificio.
Si no el placer que me genera dar.
Cierro los ojos para dar amor.
Abro los ojos para ver y agradecer a quien me lo da.

Torrencialidad

Tormenta de truenos, viento y torrencialidad.
Llueve de hostigo.
Llueve con furia.
Rabia que destroza floraciones.
Primavera que arranca violenta.
Cimbreando brotes.
Cimbreando las exclaustradas yucas.
Avivando el verde de las costillas de Adán.

Los que ayer estábamos en pie

Es mi sendero el que lleva a la cruz derribada.
Es un camino romántico sin ninguna  popularidad.
Incendio que te ciega y asfixia.
Tensas cuerdas de arco por las que sigiloso hay que caminar.
Ni se callan, ni reprimen su burla.
Que seguridad poseen en su camino de barro.
No llevamos la misma dirección pero están con escarnio pendientes de la mía.
Estoy solo con el lobo y los ciervos y siento que sin palabras me entienden.
Se ríen de los derribados, pero ellos saben que somos los que ayer estábamos en pie.

Insignificantes

Que insignificante es uno ante tanto horizonte.
Quien aprecia la particular morfología de un grano de arena.
Repetibles, sustituible, olvidables.
Esos somos nimias moléculas en un infinito que ni nos aprecia, ni nos desprecia.

Un libro siempre está encendido

Un libro nunca se apaga 
Un libro siempre está encendido.
Somos presas de las redes. 
De las redes de libertad.
Y olvidamos que hay solitarios estanque donde bajo la luna nadar.
Sale el sol en los libros solo para ti.
Es monógamo el matrimonio entre libro y lector.
Nada te turba, nada te distrae en esa red de amor único. 
En esa red donde solo existen la narrativa y tú.

lunes, 31 de marzo de 2014

Desaparecen las golondrinas

Ya no cuelgan las golondrinas sus nidos bajo mi balcón.
Ya no adornan los cables, tendidas al sol.
Ya no trinan al alba anunciando el amor.
La inacción es un desprecio.
La insensibilidad es la muerte..
El tratar lo excepcional como normalidad es un asesinato.
Hacer y dejar de hacer dos bandos que se dan la mano.
Hombres buenos y malos que matan bellas golondrinas.

Reinas de diademas de stras

Reinas prohibidas.
Reinas en la obscuridad.
Reinas clandestinas.
Reinas de brillos proscritos.
Bajo burkas de arcoíris saldremos a las calles.
Saldremos a procesionar.
Protestaremos por el entierro del color del mundo.
Reinas ultrajadas.
Reinas defenestradas.
Reinas degradadas.
Reinas de la sombra.
Reinas del placer en la cerrada noche.
Reinas encerradas por amor.
Por amor al igual.
Al igual en forma y figura.
Al igual en género.
Por amar a los chicos azules.
Por desfilar orgullosas con diademas de stras.
En carrozas tiradas por hipocampos.
En caballos de plata.
Con plumas de colores.
Con los colores del sol.
Sol que algunos nublan para impedirnos ser, estar, brillar y amar.




Plomizo gris

Sin expectativas cercado por el plomizo gris.
Fantasmagórica surge la palmera en la niebla.
Gigante quijotesco que cabalga entre bajas nubes.
Dos palmos de mundo sin sol.
Lloran los tejados en la primavera de apagadas flores.

domingo, 30 de marzo de 2014

Témeme

Puertas falsas.
Puertas ocultas.
Salidas de privilegio.
Salidas escondidas.
Para los trucos de mi circo.
Para mi, tu alcazaba no es inexpugnable.
Para mi, tu castillo carece de defensa.
Son pasadizos para huir.
Son pasadizos para sorprender.
Es mi estrategia el camino de tu desamparo.
Témeme porque con mis trampas te ganaré.

Mis fuentes amigas

Calmo mi sed muy cerca.
Calmo mi sed en los próximos.
Calmo mi sed en las fuentes cercanas.
Fuentes amigas.
Amigos que sois mis fuentes.
Bebo de vuestras bocas mis palabras.
Son vuestras palabras mis ideas.
Son vuestros pensamientos los sillares de mi mundo.
Soy una esponja que absorbe toda vuestra esencia.
Soy un indecente ladrón de belleza.
Bebo de los bellos manantiales.
Nado en los estanques de los bellos seres a los que soy permeable.
Palabras prestadas, robadas, tomadas de las almas a las que espío.
De las almas que permiten que las espíe.
Sois mi vida.
Soy vuestra vida.
Mis textos son vuestras palabras.