Coleccionista de ruinas.
De cadáveres que el mar devuelve a la orilla.
Los reflejos son decadencia.
El deterioro es esplendor.
Todo lo diezmado, deviene exclusivo.
sábado, 25 de octubre de 2014
La mafia de las familias
Reglas sin orden.
Sin bien y sin mal.
Pero con la certeza de provocar malestar.
Reglas para los demás.
Reglas para delinquir.
Oligopolio de familias.
Oligopolio de mafias.
Sin bien y sin mal.
Pero con la certeza de provocar malestar.
Reglas para los demás.
Reglas para delinquir.
Oligopolio de familias.
Oligopolio de mafias.
Flirteo
Es un cosquilleo el sol a deshoras.
A las puertas de los cuarteles de invierno.
Sol que se cuela libre por la defenestrada parra.
Sol que concede a los gorriones frívolas horas de cálido flirteo.
A las puertas de los cuarteles de invierno.
Sol que se cuela libre por la defenestrada parra.
Sol que concede a los gorriones frívolas horas de cálido flirteo.
Cornucopias
Escudos que reflejan nobleza.
Escudos marcos de espejo.
Galanas cornucopias en las que algunos ni se ven.
Se resiste la gloria a reflejar la miseria.
Escudos marcos de espejo.
Galanas cornucopias en las que algunos ni se ven.
Se resiste la gloria a reflejar la miseria.
No hay más bello STAR que ser sin matar
Que difícil es mantener la estética cuando no se tiene ética.
Feísmo contra feísmo.
Horripilante mundo de rostros primitivos.
Indómitos en un nicho de ofuscación.
No hay que matar para ser.
No hay más bello star que ser sin matar.
Feísmo contra feísmo.
Horripilante mundo de rostros primitivos.
Indómitos en un nicho de ofuscación.
No hay que matar para ser.
No hay más bello star que ser sin matar.
jueves, 23 de octubre de 2014
Aire aromatizado
Colegir el evocador sopor.
El calor huido.
La llama perdida.
Rememorar el abrazo.
Aire aromatizado en el almíbar de tu boca.
Cerco estrecho que se abre.
Y en el abrirse me abandona.
Cuarzo rosa que brilla en las lluvias de primera hora.
Se desnuda la higuera.
Y llora la piedra con verde esmeralda.
El calor huido.
La llama perdida.
Rememorar el abrazo.
Aire aromatizado en el almíbar de tu boca.
Cerco estrecho que se abre.
Y en el abrirse me abandona.
Cuarzo rosa que brilla en las lluvias de primera hora.
Se desnuda la higuera.
Y llora la piedra con verde esmeralda.
Dios todo lo consiente, todo está con sentido
Se refina la basteza con el almíbar de la niebla.
No hace distingos la bruma entre lo romo o cortante.
A ambos lame.
A ambos suaviza.
Sale el sol en el valle para el manso y la fiera.
No hace distingos la bruma entre lo romo o cortante.
A ambos lame.
A ambos suaviza.
Sale el sol en el valle para el manso y la fiera.
Autocoronados
Son glorias de provinciano estanque.
De somero charco, en el que el chapoteo de una rana genera oleaje.
Autotildados.
Autoconfundidos.
Autoencumbrados.
Autoglorificados.
Autoembarrados.
Autoenlodados.
Aturde tanto asombro.
Aturde tanta sombra.
Aturde porque aquí nada flota.
Sencillamente porque sin profundidad nada se hunde.
Insultos sin nombre
No es lo mismo un canto a la vida, que vivir dando el cante.
Uno se retrata en los distingos.
Uno se retrata en las distinciones.
En esa jerarquiza de afectos, que con las obras establece.
En la memoria ni existen los sacos rotos, ni las cestas rotas.
Por sus obras les conoceréis.
No por sus palabras, calderos rotos que en la necesidad nada sacian.
A veces el "amigo" toma partido en pleitos de pobres y vuelve a ofenderte y se retrata.
A veces se da la vuelta en la calle y finge no verte y vuelves a ofenderte y le retratas.
Los deméritos que te encarcuja, el que dice que te quiere.
Que te quiere bien mal, porque hace contigo lo que para el no quiere.
Extraños amores de camarote de los hermanos Marx.
Da risa en la distancia, porque en el momento lo sentiste como un extraño y grosero pago a tu fidelidad.
El viento lleva insultos sin nombre que terminan arremolinándose en las puertas de los que hacen distingos con tanta frivolidad.
Uno se retrata en los distingos.
Uno se retrata en las distinciones.
En esa jerarquiza de afectos, que con las obras establece.
En la memoria ni existen los sacos rotos, ni las cestas rotas.
Por sus obras les conoceréis.
No por sus palabras, calderos rotos que en la necesidad nada sacian.
A veces el "amigo" toma partido en pleitos de pobres y vuelve a ofenderte y se retrata.
A veces se da la vuelta en la calle y finge no verte y vuelves a ofenderte y le retratas.
Los deméritos que te encarcuja, el que dice que te quiere.
Que te quiere bien mal, porque hace contigo lo que para el no quiere.
Extraños amores de camarote de los hermanos Marx.
Da risa en la distancia, porque en el momento lo sentiste como un extraño y grosero pago a tu fidelidad.
El viento lleva insultos sin nombre que terminan arremolinándose en las puertas de los que hacen distingos con tanta frivolidad.
miércoles, 22 de octubre de 2014
Equibocos
La vida es dar vueltas, pero no nos debe dar vueltas la vida. En cestas o en un cesto, el que hace uno, hace un ciento................Las palabras sin nombre nos confunden, porque un poso nos equivoca.........
Amurar
Amurar para que no entre la cabra.
Amurar para definir el lindero.
Amurar para salvar el roble.
Amurar para proteger perdigueros.
Amurar para definir el lindero.
Amurar para salvar el roble.
Amurar para proteger perdigueros.
martes, 21 de octubre de 2014
Abrir el corazón
Abrir el corazón es facilitar la labor al desalmado.
Son los pechos rendidos los más heridos.
Son los pechos que dan calor los más decepcionados.
Amamanta la caridad a la víbora que la matará.
Son los pechos rendidos los más heridos.
Son los pechos que dan calor los más decepcionados.
Amamanta la caridad a la víbora que la matará.
Solo para acariciar
Como se combate mejor la violencia, si no practicando la caricia.
No levantes la mano para otra cosa.
Levanta la mano solo para acariciar.
Eso es nuestro arte, una caricia a la mujer.
Una caricia a la madre.
A la compañera.
Igual en derechos, igual en oportunidades.
De nuestra mano depende el igualar y el respetar.
Que de tu mano solo salgan caricias.
Que tu mano solo sirva para acariciar.
No levantes la mano para otra cosa.
Levanta la mano solo para acariciar.
Eso es nuestro arte, una caricia a la mujer.
Una caricia a la madre.
A la compañera.
Igual en derechos, igual en oportunidades.
De nuestra mano depende el igualar y el respetar.
Que de tu mano solo salgan caricias.
Que tu mano solo sirva para acariciar.
La cultura del interés
Cuando convertimos la cultura en negocio pierde esta el interés.
Demasiados son los interesados en hacer de la gestión su modus vivendi.
Demasiados lobos que pastorean el bello rebaño para ordeñar interés.
No es la primera motivación del artista crear por interés.
Por vil interés, por el vil metal, no solo de pan vive el hombre.
Pero es mucha el hambre que pasa el artista.
Artista que no se prostituye a las redes de traficantes de arte sin alma.
Arte a la última, arte interesado del más bajo interés.
Gestores que nos etiquetan y rotulan como indómitos o dóciles.
Como punteros o sin punta.
Como maleables o poco dúctiles.
Todo lo que sale de las manos del artista es arte.
No porque lo diga el mercado.
Circo de tenderos y sátrapas que se tienen que tildar.
Tildarse en los parámetros prescritos, fijados a priori, por los que necesitan de zonación.
Clasistas sin clase, que en la teatralidad del vestuario y en los cómicos e identificables gestos sacian su mordaz ego. Y en estos relamidos escenarios de modernez dicen ser quienes son.
Son, oleaje de barco, que amodorra y aturde de tanta superficialidad.
No es necesaria estar en boga para ser un buen artista.
No es necesaria gozar de las mieles del éxito para tener talento.
Desde los margenes se puede decir al interesante centro, que su corriente es eso, solo corriente centro.
Demasiados son los interesados en hacer de la gestión su modus vivendi.
Demasiados lobos que pastorean el bello rebaño para ordeñar interés.
No es la primera motivación del artista crear por interés.
Por vil interés, por el vil metal, no solo de pan vive el hombre.
Pero es mucha el hambre que pasa el artista.
Artista que no se prostituye a las redes de traficantes de arte sin alma.
Arte a la última, arte interesado del más bajo interés.
Gestores que nos etiquetan y rotulan como indómitos o dóciles.
Como punteros o sin punta.
Como maleables o poco dúctiles.
Todo lo que sale de las manos del artista es arte.
No porque lo diga el mercado.
Circo de tenderos y sátrapas que se tienen que tildar.
Tildarse en los parámetros prescritos, fijados a priori, por los que necesitan de zonación.
Clasistas sin clase, que en la teatralidad del vestuario y en los cómicos e identificables gestos sacian su mordaz ego. Y en estos relamidos escenarios de modernez dicen ser quienes son.
Son, oleaje de barco, que amodorra y aturde de tanta superficialidad.
No es necesaria estar en boga para ser un buen artista.
No es necesaria gozar de las mieles del éxito para tener talento.
Desde los margenes se puede decir al interesante centro, que su corriente es eso, solo corriente centro.
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