jueves, 28 de febrero de 2013

El trino del gorrión

Vuestra berrea, tapa el trino del gorrión.
Acusma de locas aulladoras.
La perfecta coartada para tapar el crimen de la evidencia.
Enzarzadas en peleas de turnos de letrina.
Envarbascadoras de alevines.
Diestras en fuerza bruta.
Infectas caricias de rata.
Atesoraré leña en espera de que ardáis en el infierno

Baladronas


Balaqueras, baladronas, lumias de insondables bajezas.
Solo reináis bajo el baldaquino de las miserias.
Las mentiras se elijen, se urden, se traman, se construyen, se acicalan.
La verdad es, es verdad y ocurre, nada más.

Lo visible, lo invisible


Intentar es una forma de vencer.
La libertad es un camino, no una meta.
La única meta certera e inamovible es el fin, la muerte.
Fin de todo lo visible y principio de lo invisible.

Colipoterras

Ventisca de granizos.
Pedrisco de destrozos.
Colipoterras que en los balcones ventiláis interiores.
Y sacudís las migajas de los manteles de vuestras opíparas cenas.
Almuerzos de necrófagas.
Meriendas de negros.

Barruecos


Las devoradoras preocupaciones una mañana sin más se desvanecen.
Todo lo secreto sale a la luz.
Los barruecos, batolitos intrusivos magmaticos un día estuvieron en lo más profundo, escondidos, y la erosiva verdad con tesón los saco a la luz.
Es el arado de la sarna de vuestra sensualidad el que determinara que haga aguas vuestra subterránea salvación.

Volaré de noche

Soy un pobre mendigo con la cabeza muy alta.
Altitud de nieves perpetuas.
Secreciones de alacrán en la puerta de mi casa.
Siento unas enormes ganas de triunfar, en el tablero de la verdad, con la divisa verdadera, con el mando del rey, mi Dios.
Nervioso e inquieto, interiormente lloro, arrastrando este haz de lutos de asesinas arpías.
No advertí mi vulnerabilidad hasta que no vi mi flanco débil rendido.
En el chaparrón de mentiras.
Soy el último entre mis iguales.
Y el igual de los últimos.
Arrecia el temporal y preparo mi exilio.

Pajarucos

Será la consanguinidad, la que logre la supina perversidad de tu estirpe. 
Estirpe de malhechores.
Cohorte de mondongas y pajarucos rijosos y vaciadespensas.

Diferencias


La fuerza de la diferencia.
En las diferencias esta la fuerza.
Cambiará el mundo el que despunta de la masa de iguales.
Sin estridencia, sin fricción, sin chirriar.
Se acoplaran los engranajes de la rutina a la nueva rueda dentada.
Y el transcurrir del mundo virará.
Si tienes ese arma cambia o el sistema te fagocitará.

miércoles, 27 de febrero de 2013

Guadañadoras de belleza

Ladran las furcias vocingleras.
Ladran las furcias balconeras.
Ladran las bocas ponzoñosas.
Ladran y ladran para sordos.
Las oteadoras.
Las oleoras.
Las alcahuetas.
Las corniveletas.
Oleaje de difamaciones.
Las que ponen luz sobre las motas de polvo de las casas de otros.
Se que creéis en Dios.
Pues yo se que Dios no cree en vosotras.
Jineteras del apocalipsis.
Sarpullido de pústulas.
Fistulas anales.
Aradoras de la sarna.
Odres de hollín.
Guadañadoras de belleza.
Cizañas.

Profanado


Y la antorcha pondrá luz sobre la mutilada belleza, sobre la mutilada pureza, sobre la mutilada perfección. 
El hombre y el tiempo diezman y mutilan santidad. 
Pero todo deja testimonio de daño, colisión y existencia aun siendo hoy carencia. 
Bello altar de lo erosionado y profanado.

Hilo de Ariadna

¿Que queréis legar al mundo.?
Si sois zorras que os preñáis para comeros a vuestros hijos.
Ruina de las ruinas. 
Catástrofe de de las catástrofes.
Satánica endogamia.
Defectuosos genes de perdición.
Quien podrá salir de vuestro laberinto sin tener el salvífico hilo de Ariadna.

Juego sucio

Yo me cruce en vuestra trayectoria.
Y a pesar del alto precio me volveré a descruzar.
Yo iluso creí que ganar era jugar limpio.
Y en este injusto juego gana el más traidor.

martes, 26 de febrero de 2013

Tanto, tanto


La desventaja que da amar.
Y yo a mis ángeles los amo tanto, tanto, tanto, tanto, tanto..............
Que se perder por amor.

Leyes para tropezar


Leyes de hombres.
Legislación humana.
Reglas que se cambian a voluntad del zaíno.
A conveniencia.
A traición.
Si injusto es tropezar.
Más injusta es la condena del tropiezo.
Leyes para zancadillear.
Si injusta es la calumnia.
Más injusta es la estela de daños colaterales que ella conlleva.
Tropieces o te hagan tropezar, ya nunca te levantaras igual.

Gavetas del corazón


En la estanqueidad del cajón.
Encerrado en la cómoda.
Gaveta de secretos.
De cartas no enviadas, de dudas.
Sobre lacrado:
De palabras afiladas.
De palabras de alivio.
Pensamientos escritos para esquivar la pena.
Nadie las debería ver, pero nosotros en nuestra recamara necesitamos visibilizarlas, para diseccionarlas, para abarcarlas y poderlas digerir.
Son dardos de intimas ofensas.
Pedradas de amantes..
Pecados indecibles.
Tormentas del alma.
Justificación de vicios.
Deseos malditos.
Claudicaciones, íntimos duelos.
Cámaras cerradas que no abrimos, o abrimos a solas, para que no se desmorone el castillo de naipes de nuestra calculada externa presencia.