Es la turba un regato infecto.
Una marea de tábanos.
Aplauden veletas el viento más recio.
Arderá la mecha del cañón que contra ella misma apunta.
Inconsciente mar que en su misma crispación se ahoga.
Capaz de lamer con el amor de una jaculatoria.
Capaz de morder con la ferocidad de la orden de ataque.
Como culpar a un todo, si en el todo estamos todos.
Crímenes de turba que siempre quedan sin castigo.
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