Marzo mayea

Me levanto en blanco.
Con el sol en la frente.
Y sintiendo la desazón de las mimosas.
Sintiendo el aleteo de las arribadas sementeras.
Me levanto lamiéndome las llagas de los malos sueños.
Me despierto triste pero preñado de empeño.
Días de sol estremecedor que evapora la exigua humedad de las macetas.
Días de confuso marzo y confundidos robles.
Todo ya esta en floración, pero aun no ha llegado la florida primavera.
Todo despierta hambriento de sol.
El sol con su calor todo lo despierta.
Cuando marzo mayea.
Mayo marcea.

Sin estado, estoy esperando que me pidas estar

Estoy sin estado, no tengo estado ninguno.
Seré liquido, solido, gaseoso, seré lo que me pida el que me quiera contener.
Seré lo que desee el que me quiera amar.
Seré liquida caricia, solida fortaleza, etérea belleza, seré solo para complacer.
Solo para retener, solo para dejarme asir. 
Seré solo ser de amor, estado febril del alma, que se doma para ser todo lo que le pide el amado.
En ti me contendré, a tu bello contenido envolveré.

Estéril preñez

Se enzarza el recreo, se enzarza el patio, se enzarza uno, porque no se puede estar en este trajin en la inactiva calma.
Ventarrón de promesas que hincha velas, que mañana con la estéril preñez, virulentamente reventarán.
Olas de cólera, olas de ira, bravura de revanchismo, de ejercito de cizaña que quiere asolar con el trigo.
Pero sin trigo no hay mañana y con el gandul se arriba al poder, prometiendole remunerada molicie, pero no se construye orden porque el sin oficio es desorden.
Buscáis revertir el sistema, pero solo para ocupar la poltrona del sistema que solo en apariencia vais a derrocar, deseando el fruto de su sudor, deseando su fruto sin sudar.

Para que la muerda el sol

La belleza no es una fina labor que se hace hondear para que la muerda el sol.
No es una delicada seda que se permite que la manosee cualquiera.
No es un perfume para que se embriague el vulgo.

Bajo perfil

No hay escondites seguros.
No hay nada seguro.
Y nada nos asegura una tranquila y larga existencia.
No nos podemos esconder del destino.
No nos podemos esconder de la vida.
El tiempo nos abrasa aun estando guarecidos.
El tiempo nos desguarnece para que quedemos desprotegidos.
Lejos de las sucias manos que todo lo manosean.
Lejos que no a salvo del manoseo.
A salvo sin existencia.
Sin existencia para estar a salvo.
Vivir para no sobresalir con un muy bajo perfil.

Dilación

Dilacera la dilación.
La espera en la heladora intemperie.
Sin atrición no hay perdón.
Sin acción que ataje el mal, el mal se hace infinito.
Y nuestra mortal vida es finita.
Y nuestra paciencia quebrantable.

Braille

El inocente amor busca el placer.
Busca el placer, en deslizar por el rostro del amado, las yemas de los dedos.
Y leer en su suavidad, que está cautivo, de la ceguera de amor.
Amar con las manos.
Amar con los mimos.
Mimar con las yemas.
Desear, pero postergar el sexo enturbiador.

La estabilidad

"La estabilidad se basa en mantener a raya a la invasiva inestabilidad."
Yoransel de Omatog

Toxico humo de tonto

Que temible es el minuto de gloria del tonto.
Que temible es su delirio.
Tontos envestidos de gloria.
Que tiran por el precipicio el sentido común.
Tontos que en televisada osadía venden humo.
Toxico humo de tonto.

La curiosidad, las curiosidades

"Soy curiosidad, por eso mi casa es un gabinete de curiosidades, por eso mi ser curiosea, por eso me muevo en el curioso mundo de vivir coleccionando excentricidades."
Yoransel de Omatog

El mar de la normalidad

Son los raros con sus rarezas los que hacen progresar el mundo.
Son las mutaciones del raro las que esquivan el agresivo devenir.
Es una proeza ser raro en el mar de rechazo del normal.
Mar de rechazo que el raro tiene que sortear.
Sangra mucho más el raro cuando es elegido blanco.

Impactos

Vivimos ignorando las colisiones.

Vivimos aun así buscando colisionar.

Los impactos no dan vida.

Solo hacen desaparecer muchas almas.

Y que el sanguinario vencedor viva mejor.

Bombardeos intensos tardíos.

Que originarán las nuevas formas de vida.

La elegancia

"Todo tiene su edad, pero la elegancia como buena excepción no la tiene."
Irsia Carolain Sprimbol

Tos

Me rinde el láudano.
Me rindo en el dolor de las palabras que salen de una llaga.
¿Como pensar? En este postrante devaneo de tos interminable.
Espiral de frases febriles.
De atolondrador dolor de cabeza.
No puedo más, pero a pesar de que me siento morir, puedo.

Convidado de piedra

Demasiados profundos errores.
Demasiados repartos entre amigos.
Falaces palabras para tapar desatinos de ramplón.
La miseria moral crea fulaneos de alcoba.
Torpezas de baladrones que la teta no sueltan. 
Y el convidado de piedra con las mismas necesidades y el mismo hambre.