sábado, 3 de diciembre de 2016
Parando el dolor
Parando el dolor.
Frenando la furia que en segundos atenaza.
La nieve perpetua del invierno de la tristeza.
Parando el dolor.
El alarido de impotencia.
El llanto que precipita a mis pies níveo y helador.
Parando el dolor que me impide caminar.
Parando el dolor con puñados de sal.
Arribadas y arribistas
Señores inconvenientes, que cifran su señorío en moverse por conveniencia.
Torpes que amparados bajo lastimeras capas de mugre, juegan a ser progres.
Tipos típicos, de brillos de frite, con olor a cebolleta y fritanga.
Somos tristemente lo que parecemos, la mierda que amparamos, somos la mierda en la que nos movemos, somos el apolillado harapo que nos viste.
Sofocos de sobrepeso, de sebos rosados, de sebosos babosos que vienen de lejos, vendiendo titiritera alcurnia, bodoquera fama, cacarañadas destrezas.
Presas fáciles de la ladilla, el chinche y la garrapata.
Varones sin dandy, de tufo nada fino, de caligrafías galanas de charco de nada principescas ranas.
Amigos de las rayas blancas, de las pastillas tóxicas, de descencerradores porros.
Fulanas que el mal star aquí en esta sierra orilla y que entre la orinada pacotilla buscan su brillo, de orientes amarillos y chafardeos naranjas.
Maridadas pánfilas de eructos febriles y papos viciosos, atufadas de vinazo y cuarteleras leches rancias.
Lacrimal orfandad
Moja la fina lluvia la cabellera de cielo.
La almibarada sonrisa de lanzas de pureza.
Calma de ciclos de noches.
De ciclópea resinación.
Se asientan sin masa los enormes desconsuelos.
Facetados cristales que multiplican pesares.
Lagunas estigias de hiel y sal.
Sin vida, sin poder ser habitadas.
Islas desiertas sin firma.
Islas bajo metros de lacrimal orfandad.
De plumas y oleaje
Son los estados de debilidad los que conforman nuestro perfil.
Curtidos en los arrabales de poniente.
En la playa de marros basálticos, donde el oleaje lame proyectiles.
Son los segundos de indefensión los que retratan el indómito vicio.
Plumas que a la orilla lleva la espuma del mar.
El necio viento
"Somos presos del valor, esclavos de la valía. Seres que nacen elevados a sabiendas de que el necio viento, tumbará su flor."
Irsia Carolain Sprimbol
Dédalos de espuma
Dédalos de espuma.
De furia salada.
Recovecos donde la pasión se desbrava.
Donde el amanecer se pierde.
Serpenteo de recelos y desconfianzas.
Las flores muertas
Búcaros para las flores muertas.
Flores para los bellos muertos.
Somos adornada tragedia.
Tragicómica
existencia.
Desestabilizadora impaciencia.
Días de niebla que desdibujan monstruos.
Monstruos que sólo salen a pasear los días de niebla.
viernes, 2 de diciembre de 2016
De pares
La felicidad se construye con dos corazones.
Que sincronizan latidos.
Y se arropan en los temores.
Es par el amor.
Porque amar no es ser primero.
Amor es igual que rendirse y ganar.
El circulo de mi defensa
Duermen mis perros, rodeándome en el corto mundo.
Cerrando el circulo de mi defensa.
Cerrando el muro que me acaricia.
Son soldados sin órdenes.
Peones que son reyes.
Como no querer a quien tanto me quiere.
Como no amar a quien tanto yo debo.
Les siento en sueños espantando pesadillas.
Son mi calor, cuando días como hoy,
me cercan las nieblas y el sol nada brilla,
Cerrando el circulo de mi defensa.
Cerrando el muro que me acaricia.
Son soldados sin órdenes.
Peones que son reyes.
Como no querer a quien tanto me quiere.
Como no amar a quien tanto yo debo.
Les siento en sueños espantando pesadillas.
Son mi calor, cuando días como hoy,
me cercan las nieblas y el sol nada brilla,
El alba nos desnuda
Los cuerpos que nunca tuvimos nos persiguen en los sueños.
Cuerpos que nos esclavizan y nos fuerzan a amarlos.
Rendidos ante las torres de la gloria ansiamos no despertar.
Sueños envolventes que al alba nos desnudan.
Arrojándonos a la calle del frío y el lodo.
Herido está el cerco
Mis sueños retrasaron el alba.
Perdieron el tino.
Se rindieron a la calma.
Herido está el cerco.
Herida la espadaña.
Precipicios donde se precipitan los estados.
Patíbulos en los que lo mismo que morimos, resucitamos.
Somos las lesiones que resistimos.
Somos los hombros fieles en los que lloramos.
Acerico de rayos delatores.
De luces hirientes que desvelan cacarañas.
jueves, 1 de diciembre de 2016
Pastos con interés, pactos de interesados
Pastamos mansos en las praderas de la pasividad.
Pastamos pastoreados por los agentes a los que nuestra pasividad interesa.
Sólo el interés pastorea.
Solamente interesa pastar con un interés.
Que interesados son los pastos.
Que interesante es pactar.
Mínimos tras los máximos
No generan estanqueidad las cautelas.
De nada vale tener la piel muy gruesa.
Servicios imprescindibles que generan dependencia.
Franqueza en la firmeza, sinceridad que genera permeable margen.
Sin marginalidad, pues es mi epidermis vulnerable.
Eufemismos
Preciadas palabras que esconden miserias.
Palabras eufemísticas y miserables.
Cuentos para tapar malas cuentas.
Plomo que araña
Vuelve a llover, con la triste banda sonora de ayer y de ayer.
Con la fineza hiriente de mil estiletes.
Con el corte preciso que abre misivas.
Cartas de perdido consorte.
Suerte de viento y aguacero.
Noche que se desmorona en llanto.
Plomo que araña baldíos.
Y rebosa macetas, pudiendo azaleas.
Llueve y se llena de verdín la piedra.
Y sangra maleza la llaga del sillar.
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