jueves, 25 de enero de 2018

Parálisis facial


"La tensa comicidad infecta la preeminencia, las filas estelares que por obra y gracia de la parálisis lucen hieráticas, distantes muecas que los distinguen y que en la toxicidad se clonan y remedan.
Vivimos tiempos de clasistas intervenciones, tiempos entre costuras, tiempos de rostros zurcidos, de tensiones falaces, de fauces de nivea porcelana, tiempos en los que creemos burlar al tiempo combatiendo la distensión."
Irsia Carolain Sprimbol

miércoles, 24 de enero de 2018

Hilos invisibles


Con frecuencia, las costuras del delito no son nada zafias, a veces son relamidas costuras, discretas, muy discretas, de hilos invisibles, patronaje exquisito que viste a la mentira de sublime beldad. El delito algunas veces, se enfunda de aparente legalidad, se calza el blanco guante de la hipocresía social, que solo lee medias verdades, que son las peores mentiras y las más difíciles de desmontar y detectar.

Secretos


Nada quema tanto como las palabras secretas.
Arden en nuestro interior, claman en nuestras entrañas.
Son fuego que necesita ser liberado.
Cuenta secretos, si quieres pregonar una falsedad.

Ansia


Los demonios habitan en nuestras ambiciones.
Habitan en la intranquilidad generada por los celos.
Valle de sombras de pinares erectos.
Esqueletos arrasados por el ansia.
El ansia de las negadas primeras filas.

domingo, 21 de enero de 2018

Barrizal de sangre


Peones sin fiereza, 
son los corderos. 
Los niños que inmola el general, 
para ganar la guerra.
Frágiles soldaditos de calamina.
Quebradiza es la victoria de hoy,
vejación que escribe las contiendas de mañana.
Barrizal de sangre de inocente,
son las trincheras.

jueves, 18 de enero de 2018

El manso


El mar no quiere valientes.
La guerra demanda estrategas.
No es del fornido el legado.
Siempre legisla el manso.

miércoles, 17 de enero de 2018

En mis sueños alimento fieras


Es bueno soñar con fiereza.
Es bueno cercar a la presa, con una empalizada de peones.
De sus propios peones.
Flanquearla por torres.
Rodearla de alfiles.
De enemigos en sus filas, que le impedirán dormir.
Y sin descanso, erosionar su maldad.
Y sin descanso, descorrer el telón que tapa sus miserias.
Sueño con fiereza y en mis sueños alimento las fieras, que despedazarán a quien osó zaherirme.

lunes, 15 de enero de 2018

Hijos de la ira


La vida es ingrata.
Sin tener un sitio a donde ir.
Sin el calor de un corazón sincero.
Es fácil arrepentirse de la bondad.
Víboras que han crecido al calor de mi pecho.
Olvidarás tus debilidades y en la confidencia te rendiré yo.
No soy hijo del perdón, soy hijo de la ira.
Es suavidad el consuelo.
Hay que sembrar miedo, repartiendo pan.

domingo, 14 de enero de 2018

Peones


"Los peligrosos son los pequeños, los seres mediocres a los que no has prestado la suficiente atención. Peones que deciden que tú pierdes la partida."
Irsia Carolain Sprimbol

miércoles, 10 de enero de 2018

Reinas seriadas


Reinas con coronas de plástico.
Reinas efímeras y seriadas.
Sirenas que con sus cantos atraen la tragedia.
Desfilan los jóvenes cuerpos por los sórdidos corredores entre bambalinas.
Manzanas perfectas que el ajetreo de la noche y los brillos del strass, bollarán.

Algunas veces el amor vuelve


"Algunas veces el amor vuelve, muchas veces las historias de amor fracasan, no porque llueva dentro, sino porque hacemos caso a los que critican desde fuera, cada amor es un mundo y no todo el mundo entiende cada amor. Primeros entre iguales, a veces los primeros en llegar, no son tratados como iguales."
Irsia Carolain Sprimbol

La Academia Militar de San Petersburgo


Aquella mañana de miércoles de marzo era ventosa, muy fría, nublada y desapacible. En el mercado Nikolski, al lado del canal Kryukov, se reunían los campesinos que buscaban trabajo, allí iban los patronos a contratarlos. Con la llegada de la primavera eran muchos los trabajadores demandados, albañiles, estuferos, horticultores, jardineros, carpinteros......
Ivánov, no tenía mucha experiencia, salvo como mozo de bar y en chapuzas muy básicas, que eran las  tareas que había realizado en el burdel de Baran. Aun así fue contratado esa misma mañana, como peón de un jardinero que acababa de conocer. San Petersburgo, era una ciudad de palacios, era la capital de las Rusias y con la llegada del buen tiempo, había que embellecer los dormidos jardínes.
Los habían contratado para trabajar en los jardines del Palacio de los Condes Vorontsov.

martes, 9 de enero de 2018

Mentir


Mentir es una torpeza, mentir es treta de torpes.
Es cerco, en el que uno asimismo se encierra.
Es cárcel, que nos impide vivir la sinceridad.

lunes, 8 de enero de 2018

Pavlusha


Dasha, le invito a sentarse a la mesa y le sirvió un tazón de sopa caliente.
- Tómatelo, de dijo con voz maternal y sincera.
Mientras Ivánov entraba en calor en la cocina del burdel de Baran, Dasha lo sometía a una bateria de preguntas, propias de una tía soltera que quiere ponerse al día de la vida de su sobrino querido, que acaba de regresar del infierno.
Dasha, tras todas las preguntas le decía, antes de que el joven contestara.
-Te veo bien, estas tan hombre, tan mayor, si Mila te viera.
Cuando acabó la sopa, le sirvió un vodka, y le dijo.
-Ve a mi casa y espérame allí, te llevaré algo para cenar y me cuentas.
Y tras decir estas palabras, Dasha lo abrazó con fuerza, le dio unos sonoros besos y le metió en el bolsillo del gabán, un paquete de cigarrillos.
Ivánov, estaba dormido cuando regresó Dasha. Se había quedado traspuesto en el sillón que, la cocinera de Baran, tenia delante de la chimenea. Dasha entro en las habitaciones que tenía alquiladas en el barrio judío, al lado del mercado de Nikolski y colocó sobre la estufa de hierro fundido, la fiambrera en la que traía al muchacho, un guiso de atún. Para Dasha, Ivánov seguía siendo el niño ultra protegido de Mila, el niño que ella también habia ayudado a criar, en aquellos años tan duros donde Pavlusha, como matrona del burdel, se quedaba con casi todas sus ganancias obligandolas a soportar mil penurias, hasta que llegó la cartilla amarilla, que les permitía ganar algo de dinero y dejar de estar sometidas a la esclavitud impuesta por la usurera de la mujer de Baran.
En Ivánov, aquella noche volvio a aflorar el niño travieso y consentido que fue en aquellos años duros y que él, vivió entre algodones, gracias a los sacrificios de Dasha y Mila, que vendían la efímera frescura de sus cuerpos, mientras eran desplumadas, por la zafiedad de la perra vieja de la matrona del burdel de Baran.



domingo, 7 de enero de 2018

Dasha


Cuando uno entra en la cárcel queda marcado y cuando se sale, ya nada es igual.
La prisión escribe en nuestra piel, garabatea que somos suyos y que más pronto que tarde volveremos a visitarla otra vez.
A pesar de que Baran, sabia que él, no habia realizado el hurto, no lo quiso admitir en el trabajo, de mozo para todo. Nada es justo en la calle y Baran que lo había visto crecer, que habia explotado a su madre hasta mandarla a la tumba, pago la fidelidad de Ivánov, con un atronador portazo tras arrojarle al suelo de la helada calle, un atillo con sus cuatro pertenencias. Fueron unos minutos infinitos, de pie en el hielo, perdido en una libertad que le producía vértigo, hasta que desde la puerta de mercancías le gritó Dasha !Ven!
Dasha, era una amiga de infortunio de su madre, pero a diferencia de Mila, la suerte de Dasha, fue que aprendió a cocinar y cambio a tiempo las alcobas, por los fogones, el estar semidesnuda en las salas del burdel, por la cálida cocina, el estar bebiendo vodka a todas horas para entrar en calor y poder soportar las largas jornadas de vicio que les imponía el usurero de Baran, por probar la sopa caliente de patata, que hacía para alimentar a las desgraciadas que vendian sus cuerpos en el salón.