Juegos sucios

No está limpio lo que no lo parece.
Son las normas del infierno de la apariencia.
Reglas de un juego sucio.
Reglas que enjalbegan lo negro.
Reglas que enrasan lo tuerto.
Reglas del disimulo, del teatro, del fingimiento.
No todo lo que parece limpio está limpio.
Frío en los encopetados salones, iluminados por las arañas de los falsos destellos.
Porcelanas desbordilladas que en las vitrinas lucen su lado bueno.

FELICIDADES REY JUAN CARLOS I DE ESPAÑA

La perfección no existe. Pero a pesar de su no existencia, existe el intento de aproximarse a ella y el trabajo que entraña su persecución.
Vivimos tiempos cainitas, donde los amigos de la quijada de asno todo lo critican y denostan. Amigos de la damnatio memoriae, de lesionar o intentar ensombrecer la memoria de los magnos, de los grandes.
Es grande la torre de las proezas de nuestro Rey, mal que les pese a los que buscan minarla.
No es todo disfrute en la vida de servicio de este Rey de Jerusalén, de nuestro Rey Católico de España. Él no eligió el camino fácil, porque servir a todo un pueblo y ser el abanderado de un cambio de régimen ejecutado con éxito, ejecutado con esa maestría de quien antepone el deber al placer, de quien humano como los demás y sujeto a las mismas pulsiones, supo ser el prohombre que conscito en torno a él, a los padres de nuestra democracia. No es nada fácil, aunque muchos, después todos estos años de bienestar, lo vean muy fácil.

FELICIDADES REY JUAN CARLOS I DE ESPAÑA. 

El verbo limpio

"En la galanura se pierde la contundencia, se pierde en tino, se pierde la puntería. Poco se acierta, cuando el discurso se florea y nada aflora en él, y las verdades devienen insondable y alambicadas, escondidas en grutas de ladrones, encarceladas en las torres del almíbar. Tiempos melifluos de bodoques enjalbegados. Y deviene el sentido común, en el menos común de los sentido y se considera torpeza atinar con el verbo limpio, con el término concreto, que sin ambages designa al vil y a sus vilezas. No es el enredo certeza, es sólo trampa que sirve a la sordidez de un sibilino estratega."
Irsia Carolain Sprimbol

Evitamos nombrar lo evidente

Evitamos nombrar lo evidente y entramos en el juego de las mentiras correctas.
Elidimos por ultracorrección y silenciamos la verdad.
Vocablos vacíos que nos llevan a la vacuidad, a la desleida dialéctica de los pusilánimes.
Existimos en la rotundidad, en el golpe del vocablo perfecto, en la precisión de la palabra precisa.
Nos perdemos si recurrimos a subterfugio de tibio, al término blando que impreciso define.
Vivimos tiempos de laberintos dialécticos que esconden la realidad.
Tiempos incorrectos de indefinición, de almibaradas frases que quieren criticar y suenan a alabanza.
Tiempos de afeites y irisados contornos, que desdibujan los bordes del filo de la reflexión certera.
Tiempos de intencionados desatinos, que buscando no herir, hieren de muerte la certeza.
Evitamos la angulosa verdad, redondeando sus bordes.
Tiempo de relamidos, de lechuguinos y necios.

Mis heridas tras la caída

Es la vileza de los que te apuñalan en las horas bajas.
Horas de acentuada tortura, de oportunistas torturadores que en la caída vuelan en círculos.
Hampones que esperan, que transitemos por el erial del fracaso, para dispararnos a quemarropa.
Lleno de llagas no tengo amigos, sólo una jauría de hienas que espera, que me rinda la vigilia.
El calor de mi manada es mi fuerza, no soy nadie sin los perros de mi manada.
Ciudadela de afectos que cauteriza la sangría de mis heridas tras la caída.

FELIZ AÑO NUEVO, FELIZ 2019

No hay tregua en el tiempo, siempre corre veloz sin pausa.
Somos nosotros los que creamos hitos en el efímero vivir, para sentir en ese celebrar que quemamos etapas.
Vivimos contando y vivimos tiempos de descuento.
vivimos aturdiendonos con las burbujas de la fugaz gloria.
Los segundos nunca vuelven y el reloj de la vida con sus agujas cose nuestra mortaja.
Que felicidad podemos buscar, si la felicidad es sólo un precipicio hacia la insatisfacción.
Seres débiles, debilitados por las horas, por el blanco níveo de los días sin tacha que cada amanecer nos brinda, y que nuestra aturullada jornada siempre emborrona.
Os deseo la quimera de la felicidad incompleta, para los nuevos días que a las 12 esta mágica noche comienzan.
Uvas que no alcanza la zorra y al no alcanzarlas se autoengaña, con un amargor de inmadurez que justifica que no las alcanza.

Enfrentar bravura

Finjo que gano batallas, que abro mares.
Puede que cambie el viento.
Que cambien las coordenadas del infierno.
Puede que se aleje la costa.
Que el océano se ensanche.
No todo está a favor de tu mezquindad.
Puede que los zafios no ganen nunca más.
Sólo se enfrentar bravura, sólo se afrontar al bravo mar.

Cretina locura

Es tan infinita la muerte, como lo será el olvido.
Sujetos que buscan la gloria, cuando la gloria es una quimera.
Frases que buscan vencer el infinito, que buscan un hueco en la historia.
Talentos de mortales, talentos caducos.
Ni el mal gusto sobrevive aunque tristemente tiene una vida más larga.
El mundo nos contempla, mientras nosotros nos empeñamos en abarcarlo.
Cretina locura de animales superiores que en la insatisfacción encuentran su infierno.
El horizonte nunca es un punto de partida.

Distintos estados

Estando en el mismo lado, que distantes estamos.
Sin una frontera clara, pero sintiéndonos en distintos estados.
Males de rasos, de páramos llanos, asolados por la cizaña.
Fronteras artificiales marcadas por el regato de los esputos y las malas babas.
Síndrome maléfico que padece Cain.
Mezquinas desarmonías que generan envidia y tensión.
Satrapías de mediocres, de hermanos que construyen en la división.

Se empañan

Lo pondre en mi lista de deseos, al lado de las personas perdidas, al lado de los afectos que temo perder.
No son estancos los pensamientos, son una maraña de amores y aromas que se enredan como un zarzal.
Espinosos pensamientos que en la proximidad se hacen daño unos a otros, se contaminan, se empañan.

Cavernas

Todo está zonado, todo tiene su casilla,  todo tiene su nicho en la cadena trófica.
Marcados por lo que devoramos, marcados por quien nos devora.
Por los delitos que silenciamos, por los delitos que nos silencian, por los silencios que amparan el lucrativo delito.
Forzados ermitaños, cavernas desde las que vemos cómo desfilan las sombras.
Somos la percepción que atisbamos desde nuestras tribunas.
Somos sesgo, visión sesgada, afectos, filias y fobias.
Escorados por natura, tildados por contexto, desinformados por el sesgo.

Flores

Flores del fango, vapuleadas por la urgencia.
Lirios de las cunetas, de las regateras, del arrabal.
De los porches humildes, de las solanas llenas de tiestos.
Flores que desflora en hambre.
Que aja el manoseo del brabucon vil metal.

Tiempos de tiranos

Las dictaduras dimanan, no de la protección del orden, si no de incentivar el desorden. 
Vamos muy errados al creer que de la multitud de opiniones y su estéril confrontación surge el progreso. 
Es la libertad mal entendida, la libertad de parte la que nos lleva al efecto rebote, de volver a la casilla de salida. 
Caminamos hacia tiempo de tiranos, entendidos como concentrar poder, para huir del caos que es deliberar sin medida y ponerlo todo en tela de juicio, y entretenerse y perderse en el laberinto del debate. La deuda no se genera sola, la genera el mal gobernante que dilapida el capital de su pueblo. 
Vivimos tiempos de cretinos con peana, de humoristas que se creen nobeles, de artistas que generan basura, y de derechos falsos que atontan a un pueblo que siempre es borrego. 
Vamos, que olvidamos en segundos y creemos a vulgares chalanes, que nos sacuden desde el balcón presidencial las migajas de sus banquetes............

Más allá

Hay vida más allá de las frases autocomplacientes con las que se narcotizan algunos.
Hay vida más allá del edulcorado fracaso.
Hay horizonte aunque la niebla nos impida verlo.
Futuro que sólo rinde, si lo labra el tesón.

Llanto que fue mar

¿Quien arrastrará mis ruidos?
¿Quien despejará el ascenso a mi gloria?
Soy el tormento de mis traspiés.
La furia tras los tropiezos.
Soy zozobra, airado más, en el que toda proeza se hunde.
Llueve sobre mi sal y mi piel se regocija con la caricia de un llanto pueril.
Nubes que devienen llanto, llanto que fue mar.
Fingiré un star, para confundir al ser.