como afilados cuchillos
que hacen girones
mi frágil calma.
Sólo alfileres me visten,
todo prendido por agujas,
el tiempo, la vida.
¿Qué es la paz?
Un reino que no está en este mundo,
un mundo que está muy distante de mi reino.
Despedaza el machete
de la duda
mis carnes escasas.
Me abrasa el tizón
de la sombra en
el lecho yermo
de mi extraña casa.
Esclavo de los afectos,
derrotado por el amor y la espera,
por el esperar
que visiten mi casa las Parcas
y desmantelen el orden
de tanta rutina rancia.