miércoles, 24 de julio de 2013

Exceso de mesura

El peso del desengaño arrastró la perfidia, arañando el damero de mármol y pizarra de la planta basilical donde está en tela de juicio tu honradez.
No estoy solo, solamente soy discreto en mis compañías.
Rémoras plomizas e infértiles donde vais si en ninguna parte seréis bien recibidas.
Ver para sentir el dolo de traición, exceso de cautelas, de mesuras, para conmigo, solo para conmigo.

Con ellas tropiezo

Arrastra mi alma la túnica por el camino de piedras.
Se que mañana con tanta pedrada me construiré un castillo.
Hoy.
Solo. 
Con ellas tropiezo.

Zarzal de odios

Quien dará fe de vuestro óbito.
Zarzales de maldad.
Manteca repleta de enormes espinas.
Sebo toxico que no sirve ni para alumbrar.
Las más bellas flores nos alegran la vida solo un día. 
Y el zarzal de odios nos cerca toda la vida.

Provisional victoria

Cartilaginoso se ha vuelto el aire que me envuelve.
Costra que me agarrota.
Coraza que me inmoviliza y nada me defiende.
Mar de ballenas de odio.
Voces altisonantes en el silencio sin canes de mi casa.
Vertiginosos virajes que me atontan en la velocidad de estas repentinas curvas.
Acoso, más que acoso en este indebido estado de soledad.
El odio mece la cuna de mis ángeles con satánica violencia.
Ventarrón de injurias.
Alma mía recobra tu calma que mañana ganaras la nada provisional batalla.

martes, 23 de julio de 2013

Mi desdicha

Es el filo de una cortante navaja el que separa la felicidad de la desdicha.
Fácil cambiar de estado, para mi y los demás.
Vuestra dicha mañana será desdicha.
Mi desdicha mañana será mi dicha.
Cortantes estados, filos de acero de las horas de gloria, precipicio sin baranda. 
Bordes de terciopelo de los caóticos estados.
Nada es eterno, nada es perenne.
Toda floración perece, todo plantón de cardos se agosta.
Toda vereda ancha en algún punto se hace angosta.
Rodar en los ciclos, los ciclos de rodar, rotación y traslación entorno a la gloria y haciendo girar las ruedas dentadas de la demoledora desdicha.

Fulanitas enanas, zopencos y buches de grasa

Sarasas, fulanitas enanas, zopencos y buches de grasa.
Como no temer.
Como no sentirse morir.
Como no volverse loco encerrado en este cíngulo de trastornos.
Gorilones que nunca brillasteis, que envidia tan grande al brillo de los otros tenéis.
Asesinas de tocino, que el talento de otros en manteca ahogáis.

Desmedido celo el del afaníptero

Torticeras infamias.
Infamias torticeras.
Zumbido en el enjambre de la perdición.
Indebido.
Desmedido.
Indefenso.
Solo en la sala de las burócratas necias.
Gélida casa consistorial donde me asestan los Brutos mil puñaladas traperas.

lunes, 22 de julio de 2013

Rabioso sol

Encerramos a los ángeles en las perreras y permitimos que los monstruos del averno campen libres pisoteando jardines de rosas.
Asedio de cainitas asesinos de ángeles.
Rendido ante los que ninguna cuenta rinden.
Desolado ante los que no soportan que les bañe la luz del sol.
Huye la calumnia de la claridad.
Que poco le interesa exponerse al juicio del sol.
Mentiras nubarrones negros en el día del sol rabioso.

El confort de tu sofá

La muerte nos es tan ajena que la obviamos.
La cercenamos y pasamos de puntillas sobre noticias trágicas sin implicarnos y preguntarnos cual es nuestro granito de arena.
Todo esta imbricado, hasta lo más nimio.
Todo esta conectado y en todo aunque sea enorme al distancia podemos influir.
Detesto al indolente, al sin causa, al pasivo.
Detesto al segador de vidas, al que siega vidas desde su sofá, desde su molicie, desde la seguridad de su pequeño y estanco cosmos.
Desde su ramplona casa.
No soporta al que no sufre viendo sufrir.
Si no puedes cambiar lo que esta tan lejos, cambia lo que esta tan cerca de ti, empieza por compartir el confort de tu sofá.

domingo, 21 de julio de 2013

Con la varita de mando

A la virgen procesionando y con la varita de mando jodiendo.
Duro día del Carmen.
Deposite mi confianza en quien con mayor fiereza me mordió.
Confiar para ser engañado.
Desengaños para no volver a confiar.
A salvo en la rivera de lodos, fuera ya del infecto pantano.
Nada debo porque nada por mi se hizo.
Solo los muros amigos me siguieron en los escoyos, me salvaron del desplome, me dieron fuerza para mantener en pie mi gran casa, la casa de los canes.
Rodar por empinada pendiente, hasta alcanzar el llano y allí poder pensar con calma.
Virgen del Carmen procesionada por tanto necio, líbrame del manso que solo quiere trepar.

sábado, 20 de julio de 2013

Deglutir infamias

A caer de un burro pone el que ya ha sido del pollino apeado.
Codicia de estatus hacia el que esta cabalgado.
Rastro de sangre en el damero.
No tiene ya el tiempo destellos dorados y las bocas desdentadas mienten sin masticar y degluten infamias, crudas, enteras, aborregadas.

Pavoneo de fulana

Se pavonean con el buche lleno.
Opíparas fulanas que robáis flores en los cementerios.
En el rodar apisonáis campos de pensamientos.
Las agresiones son un bumerán mas tarde que temprano vuelven.
Las manos amigas que hoy a mi me acarician un zarpazo en el rostro os darán.

En las derrotas

Se curte uno en las derrotas, en las caídas.
En los golpes cianitas que te rompen los huesos y fuerzan reposo.
En el reposo de mi lecho con los huesos rotos y con el reconfortante amor de los lametones de mis ángeles urdiré la treta para amputar las manos que osaron empujarme.

Necesito sanar

Me lameré las heridas, necesito sanar, reposo, fuerza.
El mañana será duro y necesito estar erguido.
Firme, en pie, cara al sol.
Al sol de la mañana, al sol más cegador.
El que los zafios no soportan porque pone luz sobre el acarcavado paisaje de su rostro, curtido a base de perpetrar ultrajes. 
Mañana caminaré de nuevo, hoy tras el empujón y la estrepitosa caída necesito sanar.

Pesan mezquinas

Estratos de cinco días de dolor.
Se acumulan sedimentos de tristeza. 
Se depositan sedimentos de pesar.
Enredo de lapidadores.
Se compactan las capas con el peso de las malas acciones.
Que pesan plúmbeas,
Que pesan mezquinas.
Que me encarcelan en una densa urdimbre de confabulación.
Estratos que metamorfosearé para poder continuar y vivir.