jueves, 24 de octubre de 2013

La arenga más vulgar

Opíparas fregonas que aun de domingo tenéis alma de estercolero.
Hacéis causa común con la zafia y relamida estanquera y su cursi y pedófilo marido.
Como mata la envidia al sentido común y como el envidioso se suma presto a la afrenta urdida contra el superior.
Temo  la capacidad que tiene el vulgo para movilizar ejércitos, que bajo la más vulgar de las arengas queman templos, templos de amor, de armonía y de calor, calor de hogar.

Ciegas de avaricia, ebrias de victoria

Cuando la mano blanca rasgará la maraña de embustes.
Duerme el sueño de los justos la justicia.
Reposa inerte en la tierra roja la palabra certera.
Será en la hecatombe de infantes cuando el corifeo despierte.
Molicie de adormideras, que abandona en la más mísera de las soledades, a la victima.
Jauría de lobas rabiosas e incultas, que el logro del santo ansían.
No veis baladronas, que están cegadas con mortero de cal, para vosotras, las puertas de la gloria.

Cerro de cádaveres

Acarreáis hostilidades para construir vuestro camino de ascenso.
Ornadas con plumas de pavo real cacareáis las gloria de vuestra bajeza.
Putas gordas de costumbres turbadoras.
No soy el primer cordero que degolláis,  pero si el primero que os planta cara. 
Es bonita la vista del cerro de cadáveres en el que estáis encaramadas.
Tropa vil de calumniadoras que convidando a vulgares viandas el proselitismo practicáis.
Llegará la hora, vuestra última hora, la hora de los lutos de vuestra ralea, en la que mientras vosotras lloráis yo reiré.

miércoles, 23 de octubre de 2013

La indolencia del magistrado

Hamponas harapientas que os morís abrasadas en la envidia que genera vuestro zafio pelo.
Hasta que no pierda la memoria vuestro crimen seguirá existiendo.
Gordas tumultuosas con apestoso tufo a frite, que poco decoro tenéis.
Juguetea la zorra pelleja con el gorrión ante la indolencia del magistrado.

Miserables y miseria

EL PREDICAMENTO DEL TOCINO ES INUSITADO.
¿Quién reza al tocino? Si es sabido que ningún milagro obra.
Se cauteloso y temele, ansia tu altar y toda tu feligresía.
Librame Dios mio del miserable, porque de él, solo viene miseria.

Facilidades para el zafio

Las Facilidades que el sistema da al delincuente cuando menos son sorprendentes.
Es la celeridad inusitada lo que me crispa,
NADA de pruebas, solo es denunciar y la calumnia esta en marcha.
Y es al inocente al que toca demostrar su inocencia, diabólico y perverso sistema.
Como no temer al zafio si es el que tiene con el beneplácito del sistema el puñal en su mano.

martes, 22 de octubre de 2013

Hampones

Es en la generalización donde confunden a la feligresía.
Yo no hago tratos de lupanar, ni me codeo con hampones.
Es tupida la filigrana de embustes y es rica su trama.
Digno velo para el tabernáculo del templo de Satán.
Sembráis cizaña para envenenar buenas conciencias.
Me confiscáis la razón con el desprestigio que me arrojáis.
Nada temo la noche, dura lo que dura y temprano, muy temprano mañana saldrá el sol.

No es tan dificil

Encajando mamporros en el aprisco granítico donde encierran a los mansos borregos.
Cuajado de espinas esta mi corazón.
Palabras espinosas que me rinden.
Pido perdón a quien me ofende y recibo como contrapartida nuevas ofensa.
No ve saciada su voracidad la fiera a la que todo se e rinde y entrega. 
La calaña de hienas asesinas  cerca mi casa y en la sumisión esclavizo a mis hijos.
No es acertada la estrategia y busco la valentía para matar a hierro quien en acto de usura promete matar a hierro a toda mi rendida casa.
Ríos de sangre de mala madre y peor hija.
Uno no elige ser victima pero si elige hacer victima a su sangre.
Es necesario el luto, es necesario el duelo y es más necesario aun el cobro de el delito.
Nada olvido ya, con intereses el cobro espero.

Rapiña de mansos

Extiende la plaga la rapiña.
El ansia de la mano ensortijada.
El oro seca campos verde de vida.
El sable de la preeminencia decapita mansos corderos.
Son los primeros los que conducen al pueblo al precipicio de la hecatombe.
Lideres de impuestos y estrategias de enriquecimiento.
Saladores de acuíferos.
Avaricia insana de brillos y estancias brillantes.
Quien expiara el ultraje ala madre en cinta.
Escribe el ladrón y su prole el futuro del mundo.  
Zarpas de zorra que garabateáis números en la piel del blanco ternero.
Vórtice de deudas y empréstitos para hacer claudicar bravos pueblos.

Reina de libelos

Es pringosa la mentira.
Reguero de brea.
Para en pira injusta quemar santos.
Se nos llena la boca de igualdad.
Mientras la tormenta de odios recorre el angosto valle.
Valle de venganza.
De zigzagueantes intrigas.
Es la justicia de la revancha.
Iguales en discordias.
Pregona desde el ábside encaramada en alta peana la reina de libelos.
Bola remostosa de melazas a la que todos se adhieren.

lunes, 21 de octubre de 2013

En este umbral

Llora el aire tras los cristales.
Mece el viento el naranjo.
Lenta es mi reacción a la cólera.
Calma de postrimeros instantes.
Sin disputas.
Sin el ruido de los gimiqueos de los velorios.
Con la templanza de las perdidas fuerzas.
Meandrinoso último instante.
Me vence el sueño del olvido.
El sueño que todo lo perdona porque sabe que ya no hay cuentas pendientes.
El cobro es de los vivos y en este umbral ya nada se cobra.

El corto vuelo

Se desmorona mi fuerza en la disputa de familia.
Es tan insensata mi sangre.
Es tan visceral su amor que me destroza en su falta de raciocinio.
No me abarca mi sangre.
Me ahoga el abrazo de amor con su extraña lógica de afecto.
Solo y amado desde la distancia próxima que impone la falta de merito.
Mis méritos no son sus méritos.
Mi dicha no es su dicha.
Mi vida no es su vida.
Mi batalla no es su batalla.
Pierdo la guerra de mi sangre y me esclavizo al destino de mi casa.
Casa de ventiscas y lluvias rojas.
Corazón que por amor te encadenas que corto vuelas.

Festín de rapiña

Pagando aranceles para poder vivir.
Ladrones hospedados en la casa consistorial.
Tributos para los rateros de sudor.
Alardeáis de vuestro efímero estatus en los peldaños de los bocados del ansia.
Nada es suficiente para quien todo envidia y ansía.
Estúpidas nenazas que en lo más falso de lo falso os movéis.
Afónicas tras desgañitaros en el pregón de los falsos méritos, de las falsas metas, de los más falsos aun logros.
Sinos de hoy, el que merece la gloria es escarniado.
Y el verdugo vil coronado rey de este festín de rapiña.


viernes, 18 de octubre de 2013

Vivir para............

Mi vida es un morir, es un aturdirme.
Mi vida es una rendición, una buscada ceguera.
Mi vida es un camino donde voy apagando luces para estar a oscuras.
Me asquea tanto tanta injusticia que no puedo enmendar, que me duele ver y vivir para solo esto ver.

Temo, sin ver, te temo

Es menudeo la satisfacción que obtengo.
No duermo nada ante la presencia invisible de los merodeadores.
Me vencen en el miedo.
En la vigilia de rezos.
Como no temer a la mano que he visto ya mancharse de sangre mil veces.
Es inquina lo que me trasmiten las sombras del jardín.
Es odio lo que me cuenta la asustada lechuza.
Son astutos atormentandome en esta parálisis, en esta agotadora selva de ruidos de temor y recelo.