sábado, 7 de febrero de 2015

Cambio de Era

Es inasible el mañana desde el hoy de tormentas, desde el frío desierto de ideas e intestinas guerras.
Son caras las caricias sin calor en la nueva era y alimentan poco los reglones de las arengas de los vendidos diarios. 
Soy solo viento que a nadie conmueve, que nada vence y solo sigiloso se cuela entre los farallones de miseria.
Postrimeros años de hipérboles, de sinestesias y aforismos. Todo es turbadora adversidad proclamada por bocas sucias y virulentas, aspavientos de mesiánicos salvadores, que tiran las redes para hacer su faena.
Y para más dolor desde la caja generadora de tontos, la caja de los placeres vulgares y opiáceos se aliena aun más si cabe a la rendida sociedad del sin oficio, meta y alto ideal.
Cambiamos de Era y solo sentimos que entramos en una guerra de canales, guerra de los relamidos y acicalados nuevos predicadores que en oficio de tertulias y tinieblas calientan el helador e inhóspito declive de Occidente.
Más acceso a la información, nunca sirvió para menos, más medios nunca fueron tan poco rentables, nunca tanta luz creo tanta oscuridad. Ciegos que no quieren ver, corte de cacatúas lustrosas que riegan de sal el fértil valle, que regalan sal a los sedientos, que echan sal a las llagas, que salan lo salado y crean una sensación de sed insaciable.
Hambre de vacía nada, de viciado y atrofiador alimento, hambre infecunda que tras saciarnos no genera energía ni para mantenernos en pié.

Despertar

"Pedir es como soñar, luego llega la negación y despertar."
Irsia Carolain Sprimbol

viernes, 6 de febrero de 2015

Granos de arena

Calan los mensajes hueros.
Las alharacas sin sustancia.
Tonos lineales de poesías y largos silencios.
Aplaudidos mesías que asaltan el cielo.
Fantasmas que no se han ido.
Discursos que están calcados.
Generalísismos que firman decretos aun estando muertos.
Países torcidos que son modelo.
Compraremos sogas para ir ornando nuestros cuellos.
Arengas de granos de arena que crean ciegos adeptos.

Se va

Que indiferencia tan grande produce.
Ver a quien con locura se ha querido.
Y tras tanta decepción ya no se quiere.
El amor espontáneamente llega.
El amor tras tanto fraude se va.

Ponerles cara

Es difícil querer al desconocido, pero es el prójimo y tenemos la obligación de ponerles cara. Ponerle cara y ayudarle como lo que es, un hermano que vive con mala fortuna, que ha nacido en un país donde no tiene nuestro estado de bienestar, son hermanos que en el reparto no han tenido suerte.

Piedras

Hay escusas que sirven dos veces para el mismo tropiezo. 
Hay lecciones que no se aprenden a la primera con una piedra.
Hay tropiezos que hay que repetirlos para acertar.

A tus espaldas está el mundo

También hay realidad a tus espaldas, si te das la vuelta la puedes ver.
El ignorar no anula ninguna existencia, pues hay mucha realidad que ignora el ignorante.
Electos que funcionan de parte, partes ignoradas por los electos ignorantes.

Apoltronados

Demasiados merluzos apoltronados.
Demasiadas poltronas para tanto merluzo.
Duele ver tanto zafio que desde su molicie con nada empatizan.
Pero como mal encarados tarascones nos dan lecciones de gestión.
Cuando la mejor medida seria una nueva gestión que prescindiera de ellos y de su cara y parasitaria distancia.
Cuando no corre el aire todo se vicia.
Cuando no te levantas de la poltrona te conviertes en alimaña, arribada a tu silla por partidistas artimañas.

La hipersensibilidad es cobardía

Es la hipersensibilidad de algunos vulgar cobardía.
Es el cobarde tendente a no querer ver.
El cobarde mira para otro lado.
Y el que mira para otro lado ampara en su inacción la catástrofe.
Cansa tanto ciego, tanto cegado para no sufrir, para no ver el sufrimiento del de al lado.
Ciegos conformistas que disfrutan de los logros del valiente.
De los logros del osado que al dolor quiere poner freno.
Del visionario que sin temer defiende al que el ciego no quiere ver.

Nieve

Si la nieve nos trae bienes.
Si tras las nevadas todo son parabienes.
Nunca nieva a gusto de todos.
Es la nieve un blanco gustoso.
Pero es frío el blanco níveo.
Frío de invierno, frío de ideas.
Frío que solo las guerras rojas e intestinas el panorama patrio caldean.

El mal hacer, el mal faenar

Antes del puntapié.
Segundos antes.
Para salir con la cabeza alta.
Pero con los pies llenos de lodo.
Ninguna explicación vale si se tienen injustificadamente los bolsillos llenos.
La nueva estética de la casta, pero con la misma ética. 
La cháchara envuelve tanta miseria.
La miseria es tan tendente a enfundarse con fanfarria.
El sigilo solo sirve para sus robos.
Pero para embaucar todo es ruido.
Remolinos para tapar la intestina guerra.
Remolinos para faenar.
Es mala fe la ocultación.
Es mala fe y mal faenar mentir.

Mi temor

Mi temor no es intrínseco.
Mi dolor en mi no nace.
Es una espiral que me envuelve.
Abrigo de desatinos.
Abrigado por los desatinados.
El demonio existe y la carne es débil.
No temo mi caída, temo la caída de todo un sistema.
Porque toda caída entraña un nuevo orden.
Y todo nuevo orden conlleva una nueva cúspide.
El oropel sin inteligencia no es buen rey.
Una cúspide con mala cabeza es el principio del fin.
Con ruido se llega al poder.
Pero el ruido cae con facilidad en el terror.
Ese es mi temor, el temor al terror. 

Leer las colas,leer la espera

No hay para todos, pero si madrugas hay para ti.
En las colas se cifra el interés.
En la espera la paciencia.
En la cautela el miedo.
No somos transparentes.
Pero es muy fácil leer nuestra estela de pistas.
No quiero que me ruegues.
Solo quiero que valores lo que de mi te llevas.
Lee la cola y estima cuantos y tan temprano por un beso mio esperan.

jueves, 5 de febrero de 2015

Un oficio muy bien remunerado

Salir sin valija no es salir desvalijado.
Abandonar siglas no es irse al vació.
Después de todo hemos llenado los bolsillos del familiar, del aliado.
Libres tras el troyano, podemos abrazar al glorioso producto de mercado.
Libres pero siguiendo en politica porque es un oficio muy bien remunerado.
Son pocos los que la abandonan de vació.
Son pocos los que sin montar en cólera o con una pataleta se van. 
Demasiados políticos, demasiados cargos, demasiadas cargas, con las que esta casta nada carga.

Un nuevo credo

"El Dios que más milagros promete es el que más fieles concita.
Podemos afirmar que hoy hay un nuevo credo en el panorama político nacional."
Yoransel de Omatog