sábado, 20 de agosto de 2022

Me embarga la tristeza infinita de consumir cinco cervezas a solas, el desánimo de los días, de los días iguales. 

jueves, 21 de julio de 2022

Sin altercados

No me desordena mi mano, me desordena la mano que me mece. En el calor de tus noche no hago pie. Soy islote desierto que adora el fósil que son tus huellas. Acariciame en el infierno que es saber que para ti ya no existo.
La locura habita en los días lineales, en el infierno que es no padecer altercados.

domingo, 10 de julio de 2022

Cuatro paredes

Las cuatro paredes del infierno, 
son las cuatro paredes 
que resguardan de los de violentos vientos 
al hogar. 
Teatro de sombras chinescas, 
de manjares cuajados de alfileres.
No me digas que me ves, porque los graníticos muros nada dejan ver.
Apariencias de casa grande, de magníficas fachada. 
Amores que ametrallan a quemarropa.
No siento tus caricias, 
pero si siento el urticante dolor de tu afecto, ese que doblega mi felicidad 
y supedita mi existencia a tu frustración.
Cuatro pareces como cuatro esquinas que tus carceleros anhelos siempre guardan.


martes, 17 de mayo de 2022

Verdes están las uvas para las zorras

 

Se acentúan mis emociones 
con el titilar de las luciérnagas. 
Hecha maldad y vestida de calumnias 
desfila sin proezas.
Zorras que pintarrajeadas 
ven verdes las uvas 
que su falta de ingenio no alcanza. 
En el castillo de mis sueño, 
preso de los centinelas anhelos, 
mil veces te logro y mil veces te pierdo.
Sólo te acaricia la envidia 
en la sala de los pasos muy cortos.
Ya lo sé, 
es de necios, 
perseguir tus exiguos talentos

Levógiros y sauvásticas


Levógiros.
Dextrógiros.
Sauvásticas.
Esvásticas.
El alma cándida 
se desnorta 
en la selva 
de los ruidos, 
y perdida 
se orienta 
a conveniencia, 
y en ese sentir 
pierde las reglas 
y las normas 
del partido.

viernes, 6 de mayo de 2022

Debilas


"Nos enredamos en el zarzal de las estúpidas palabras, simple y llanamente, porque somos estúpidos. Vivimos tiempos de encumbrada idiotez, tiempos de gobernantes idiotas, de zafios costaleros que procesionan a Satanás. No hay nada más dañino para el pensamiento lógico, que la necia estulticia. Quien no sabe expresarse, no sabe pensar. Almas debilas, soldadas de la campañas de su analfabeta sanchidad."

Irsia Carolain Sprimbol

domingo, 1 de mayo de 2022

Trompicones


Envejecen los escuerzos,
atufados por el agrio papo 
de la dipsomanía, 
por las calenturas de la clase 
que les negó ralea.

Llamame ingenuo, 
pero nada nubla para mí, 
el sol de abril, 
nada insignificante 
se interpone en el disfrute 
de un sol que se desliza 
sobre mi piel, 
lejos de los trompicones 
de la piel del añoso sapo.

viernes, 29 de abril de 2022

Reflejos y reflexión


"Nunca dejes de mirarte en los espejos, en los espejos no sólo hay vanidad, también está la búsqueda de la corrección."

Irsia Carolain Sprimbol

jueves, 28 de abril de 2022

miércoles, 27 de abril de 2022

Circo sin vanidad


Siento una desmedida inclinación 
por los tropiezos, 
por los caídos, 
por los parajes 
donde deambulan los heridos
en las contiendas del amor. 

Bares oscuros 
de remostosos mostradores, 
de olores agrios, 
de veladores de mármol 
donde se posan las miradas perdidas 
de las estrellas de ayer.

Siento un amor desmedido 
por los atribulados, 
por sus historias en bucle, 
donde la verdad está imbricada con la ficción. 

Siento debilidad 
por los surcos de la tristeza, 
por el cauce de las lagrimas, 
de los marginales Apolos 
y las teatrales Ifrigenias.

Siento que yo, 
también soy una sacerdotisa 
de uno de esos templos 
donde los despojados 
se inmolan día tras día, 
libando alcohol.  

domingo, 17 de abril de 2022

Envidia


¿Qué le ha ocurrido a tu rostro, gallardo bañista? 
¿A quién molestaba tu arrogante belleza?
Ni en la eternidad estamos a salvo 
de las zahínas manos de la envidia.

Los camposantos están llenos 
de estas afrentas, 
de las vulgares rabietas 
de quienes nunca pudieron 
ni herirte, 
ni alcanzarte en vida.

lunes, 11 de abril de 2022

Maldigo


Maldigo la piedra que al amarte se clavo en mi corazón.
Maldigo la toxicidad de tu aliento.
Maldigo mi sumisión.

martes, 5 de abril de 2022

La fiebre exige novedad


Las primeras incursiones son euforizantes, repulsivas y euforizantes. Tras el urgente manoseo dentro de un coche, en una cercana pensión, entre los arboles de un bosque, viene el premio, el dinero fácil, los caprichos, la urgencia por desdibujar el cauce.
La vida es prosaica, vulgar, sórdida, pensamos que la sofisticación impregna el mundo, y en realidad el mundo es vulgaridad e incontrolada pulsión, traumas, filias y atenazadoras fobias. 
Es muy fácil convertirse en un funambulista del inestable alambre de acero que es la prostitución, caminar y pasear por esa senda entre precipicios, transitar por ella pensando que saldremos indemnes. La transacción de los amores en la oscuridad es un olor que nos impregna y que ni el más caro perfume del mundo conseguirá desterrar. 
Las primeras incursiones son frívolas, inconscientes. Pero el tiempo inexorable transcurre y nos abandona sin casi darnos cuenta frente al cruel espejo de la verdad. No es lo mismo dejarse comprar, que asumir el desacarreo que es ir a la pasarela de la Calle Real a buscar que alguien te quiera comprar. La fiebre es exigente y exige novedad.
Verbos de tragedia que nos malgastan en las siestas sin placer, en los moteles de nombres ridículos, en el olor acre de la desgastada moqueta, donde el que paga por obtener placer con tu cuerpo, te obliga a rodar.