martes, 8 de noviembre de 2022

Azúcar con hiel


Neones de azúcar con hiel, 
chisporroteo de caricias robadas 
en los juegos violentos 
de una hombría carcelera, 
que me fuerza a beber 
para soportar y seguir 
el ritmo de un desamor 
de esclavitud y hambre.
En la noche puedo abrazarte
mientras me tambaleo y desfallezco 
persiguiendo una quimera
un placer que nunca llego a consumar. 
Ámame, en este infierno de soledad.
Ámame, en estos tragos tan amargos.
Ámame, y no te cuestiones mi amor.
Déjame sentir, tu dorado aliento 
y besar tu mirada azul.
Ámame, en este invierno de neón.
Ámame y deséame 
con la locura 
que te deseo yo.
Azúcar e hiel 
en los flashazos estroboscópicos 
de la caleidoscópica deflagración. 
Ámame, con la locura 
que te deseo yo.

El deseo y la codicia producen siempre dolor


La belleza tiene mucho de circo, de desfile, de regio pavoneo. 
Llámame iluso, pero la ceguera elimina tormento.
El deseo y la codicia producen siempre dolor.
No todo se puede alcanzar y perseguir sin lograr es sufrir.
Te recorre mi lascivia mil veces y mil veces muero sin sentir tu placer.


Gólgota


El sol no existe, 
ha muerto en la torrencialidad. 
Plomo de días fugaces, 
de días estériles, 
de caricias pobres y urgentes.
Me duele el corazón 
en la fiereza de los relámpagos 
que rompen la cortina infinita de lágrimas.
Me abraza el olvido 
con sus manos frías 
y me zarandea el desprecio 
de los días sin líneas.
Plaza desierta 
que ha rendido el llanto.
Tropiezo en el ascenso, 
en el camino yermo, 
al Gólgota.

sábado, 5 de noviembre de 2022

Tras el oropel


La podredumbre tras el oropel, 
las bambalinas de la fanfarria. 
Acicalados cadáveres que juegan a la preeminencia.
Mece el viento la pesada cortina, 
mece la verdad el telón del circo, 
y la vela hinchada airea la peste que se oculta tras los afeites.
Sobrevivir es destreza, 
parecer es una trama, 
una soberbia estrategia.
Nunca juegues conmigo, porque sé ganar.



Verdes


La desdicha es una taimada zorra 
que a cada paso nos acecha.
Es muy frágil la felicidad, 
son volátiles los segundos de gloria. 
El brioso corcel del placer 
rápido nos descabalga. 
Tras apretar contra el paladar la jugosa uva 
y sentir en dulzor de su néctar, 
la parra nos aleja los racimos de la dicha 
y la taimada zorra nos susurra al oído, 
ya están verdes los racimos 
porque ya no los alcanzas. 

Es plomo la inutilidad con la que lleno mis bolsillos


Infinita arena de días estériles, que me cerca de dunas de tórrido abatimiento. 
No soy corcel sumiso, pero el norte angosto me rinde.
Las sortijas de mis manos hablan de derrotas, de la rendición que es mi avaricia.
No me sientes y lo siento, no me amas y te amo.
Arena febril y loca que me sepulta en los segundos, dolor de lecho yermo, de noches frías de invierno.
¿Qué es ser rebelde en este desierto de ruidos sumisos?
No te siento y te amo.
El brillo hiriente de la usura, llena mi mesa, colma mis platos.
Es plomo el oro, es plomo la inutilidad con la que lleno mis bolsillos.

 

domingo, 23 de octubre de 2022

Mauricia Teresa


Mauricia Teresa Branvon Ambras, nunca tiró piedras sobre su propio tejado, nunca permitió que las lenguas zafias de la Calle Sorrento, denigraran a ninguno de sus extraños vástagos. El amor es prodigio, el amor es quimera, es fidelidad y locura y no con siente ultrajes ni a la peor de las raleas.

sábado, 20 de agosto de 2022

Me embarga la tristeza infinita de consumir cinco cervezas a solas, el desánimo de los días, de los días iguales. 

jueves, 21 de julio de 2022

Sin altercados

No me desordena mi mano, me desordena la mano que me mece. En el calor de tus noche no hago pie. Soy islote desierto que adora el fósil que son tus huellas. Acariciame en el infierno que es saber que para ti ya no existo.
La locura habita en los días lineales, en el infierno que es no padecer altercados.

domingo, 10 de julio de 2022

Cuatro paredes

Las cuatro paredes del infierno, 
son las cuatro paredes 
que resguardan de los de violentos vientos 
al hogar. 
Teatro de sombras chinescas, 
de manjares cuajados de alfileres.
No me digas que me ves, porque los graníticos muros nada dejan ver.
Apariencias de casa grande, de magníficas fachada. 
Amores que ametrallan a quemarropa.
No siento tus caricias, 
pero si siento el urticante dolor de tu afecto, ese que doblega mi felicidad 
y supedita mi existencia a tu frustración.
Cuatro pareces como cuatro esquinas que tus carceleros anhelos siempre guardan.


martes, 17 de mayo de 2022

Verdes están las uvas para las zorras

 

Se acentúan mis emociones 
con el titilar de las luciérnagas. 
Hecha maldad y vestida de calumnias 
desfila sin proezas.
Zorras que pintarrajeadas 
ven verdes las uvas 
que su falta de ingenio no alcanza. 
En el castillo de mis sueño, 
preso de los centinelas anhelos, 
mil veces te logro y mil veces te pierdo.
Sólo te acaricia la envidia 
en la sala de los pasos muy cortos.
Ya lo sé, 
es de necios, 
perseguir tus exiguos talentos

Levógiros y sauvásticas


Levógiros.
Dextrógiros.
Sauvásticas.
Esvásticas.
El alma cándida 
se desnorta 
en la selva 
de los ruidos, 
y perdida 
se orienta 
a conveniencia, 
y en ese sentir 
pierde las reglas 
y las normas 
del partido.

viernes, 6 de mayo de 2022

Debilas


"Nos enredamos en el zarzal de las estúpidas palabras, simple y llanamente, porque somos estúpidos. Vivimos tiempos de encumbrada idiotez, tiempos de gobernantes idiotas, de zafios costaleros que procesionan a Satanás. No hay nada más dañino para el pensamiento lógico, que la necia estulticia. Quien no sabe expresarse, no sabe pensar. Almas debilas, soldadas de la campañas de su analfabeta sanchidad."

Irsia Carolain Sprimbol

domingo, 1 de mayo de 2022

Trompicones


Envejecen los escuerzos,
atufados por el agrio papo 
de la dipsomanía, 
por las calenturas de la clase 
que les negó ralea.

Llamame ingenuo, 
pero nada nubla para mí, 
el sol de abril, 
nada insignificante 
se interpone en el disfrute 
de un sol que se desliza 
sobre mi piel, 
lejos de los trompicones 
de la piel del añoso sapo.