La neblina trae a la clausura de la torre lo impensado.
A veces no es buscar, es el choque el cauce de encuentro.
Mil monedas en la fuente pidiendo deseos y el deseo sin ser pedido tras la colisión aparece.
Por las puertas cerradas se cuela la caridad.
Se cuela por las rendijas del encierro el regalo de la ilusión.
No hay comentarios:
Publicar un comentario