miércoles, 12 de noviembre de 2014

Con los ojos cerrados ve el amor

Aun cerrando los ojos te vería.
Es lo que tiene el amor.
Que ve al amado en la más cerrada obscuridad.

La bravura

Todo tarde o temprano amaina.
Hasta las olas más impetuosas, las que más destrozan.
Mueren rendidas en la arena del pudridero de furias que es la costa.
Vigor caduco que hoy invitas al pavoneo.
Que portaré mañana como estandarte, cuando tu ya no estés.
Todo es ansia en la bravura.
Y así muere en la estocada.
Pues no es nada la fuerza desmedida.
Si no es regida por la calmada cordura.
Corriente y contracorriente crean el propicio cauce.
Hay que entrar en cintura lo desmedido.
O fenecerá rendido tanto vigor contra el escollo de las ásperas e infértiles rocas.

martes, 11 de noviembre de 2014

La vulgar tristeza

Los dramas reales adolecen de pintoresquismo.
Son demasiado prosaicos.
Nadie los novela.
Amarga ironía.
Solo llueve sal sobre la vulgar tristeza.
No tiene musicalidad el dolor de las puertas cerradas.
Con un nudo en la garganta a nadie le apetece cantar.

Charcos de noviembre

No todo tiene profundidad.
No todo es profundo.
Hay tanto mundo somero.
Película de aguas estancadas que solo son nido de bacterias.
Mundo de someros charcos.
No todo tiene virtud.
No todo es virtuoso.
Dada la nula profundidad, no se pueden buscar tesoros en los charcos.
Mortales charcos de noviembre.

lunes, 10 de noviembre de 2014

PODEMOS ES UN TERREMOTO

PODEMOS sigue siendo, aunque se endulce y modere, muy radical.
Podemos es la cerilla que prendió fuego a Roma no para poder crear un nuevo orden, si no para edificar un nuevo palacio.
El que llega al poder, fácilmente se apoltrona. 
Pero meter a un gato en casa es la única forma de expulsar a los saqueadores ratones.
No creo en su discurso, solo lo estimo como devastador terremoto. 
Tras el seísmo ¿Se edificará algo bueno?

Aliados de las trampas

No elevemos a los altares la paja mojada que solo da humo.
Neblina que se extiende para no dejarnos ver.
Velos de tahúres.
Pirotecnia de ladrones.
Es la noche aliada de las malas mañas.
Es la distracción aliada de la trampa.

Nadie vive con las manos atadas

Envejecer no es morir.
Morir es dejar de creer.
Dejar de soñar.
Envejecer nos lleva a la muerte.
Pero nosotros elegimos el camino por el que queremos llegar.
Hay quien decide hacer el aire irrespirable de postrimero egoísmo.
Sin nada en las manos llegamos.
Con las manos vacías nos vamos.
Algunos deciden caminar drenando charcos.
Otros se acomodan y acaparan encharcando de carencias las vidas de otros.
Nada es impuesto.
Todo es elegido.
Envejecer no es morir.
Pero el egoísmo mata.
Camina con las manos libres y sentirás y darás caricias.
Nadie vive con las manos atadas.
Y eso es lo que hace la riqueza, ata.

La red violeta de nuestro aplacado torrente

Cuando en el corazón crecen los pensamientos.
Animados por el arrullo e los latidos,
Nutridos por la roja sangre de purísimo rubí.
Es el suelo fértil de la caricia.
Es donde entre ventrículos corretean los sueños del niño.
Del niño que los años encierran en la red violeta de nuestro aplacado torrente.
Corazón de infante, que no infantil.
Corazón panteón real.
Corazón templo de de la paloma blanca de la paz.
El corazón no planea guerras pero si fácilmente se rinde al intelecto.
Testa coronada que olvida soñar.

domingo, 9 de noviembre de 2014

El amor

Nada que no se esparce da fruto.
Ley de propagación de las semillas.
Que incluye a las que caen en pedregal y no germinan.
Es un derroche calculado, que no frena el exceso.
Pues son muchas las que caerán en tierra fértil y darán fruto.

Desde el exilio

Existe la vida más allá de los provincianos muros.
Más allá de la plaza de arena de la patética ciudadela.
No se puede gritar mientras te engulle la multitud.
Desde el silencio del exilio se puede hacer mucho ruido.
Mensajero es el que habita en el confín.
En el extremo del mundo donde nadie le cierra la boca.
No está vendida mi lengua.
Nadie me cierra la boca.
Aunque el ascenso social pule, no refina.
No son lo mismo los colores de mufla que los del inalterable crisol.
Que no te rodeen, que no te cerquen.
Distánciate y veras las fisuras.
Distánciate y te oirán proclamarlas.

No apedrea el sin pecado, solo lanzan piedras los pecadores

De toda gracia adolece el que critica el delito que él ha cometido con creces.
Tapados, que a la dentellada abierta se abalanzan.
Sintiendo que rindiendo al caído volverán a la fácil pitanza.
Manos sucias que queréis ir a doblar blancos manteles.
La pidáis en plaza publica al pillado de hoy, porque vosotros tuvisteis la suerte de no haber sido pillados ayer.
Envidiosos de mieles ganadas en el engaño y perdidas por el engaño de los siguientes.
Se os llena la boca de decencia, cuando vuestras palabras hieden a papos saciados en la indecencia.
Critica la rata al ratón, cuando los dos saquean el granero.
Dais asco y vuestra farsa aun da más asco.
Lavaros las manos antes de coger las piedras, porque las piedras que lanzáis van manchadas de delito.
No esperes nunca clemencia de otro delincuente.
Duele perder la Teta, duele la Teta perdida.
Y se hace lo imposible por volver a tenerla.
Serpollos, viles mamones que hieden a oligarquía sin color.
Rameras de régimen, ejercito de pintonas rameras.

sábado, 8 de noviembre de 2014

Pararrayos

Es tormentoso estar permanentemente empapado.
De sabores de otros.
De tormentas de otros.
Sin mirar veo.
Con los ojos cerrados te veo.
Encrespado mar de olas de desasosiego.
Plomizo ser tan poroso.
Envidio la evanescencía del que mira sin ver.
Del que respira sin encharcarse del olor de las lagrimas de otros.
No estoy preparado para tanta intemperie.
Para las corrientes de aires de tragedia.
Soy un magnético pararrayos que sigue atrayendo tristezas.


El pueblo estamos hartos y el sistema PODEMOS dinamitar

Que no nos nuble la mente la bragueta.
Que entren en politica para servir, no para servirse del erario publico, sudor del pueblo.
Que no suframos más desatinos dictados por el ufano miembro viril.
Que no coloque a su prole, parentela o camarilla.
Que devuelvan lo robado, lo esquilmado, lo mal gestionado, lo derrochado.
Que por una vez en su vida se bajen los pantalones y digan la verdad.
Os queremos transparentes, senadores, senadores, diputados, diputadas, etc.
Hartos estamos de arribistas y arribados a las mieles de la caja común, que manejáis como propia.
Nada os pertenece, pero no es del viento, es sangre de todos, dolor de todos, esfuerzo de todos, sudor y lagrimas.
Es grande el hartazgo de vuestra caterva y calaña, de vuestro vil parasitismo, y de vuestra pompa y boato.
Fariseos, rameras irredentas que embadurnadas de afeites de cordero al pueblo embaucáis.
Es grande el hartazgo de vuestra nula enmienda, de vuestra nulo expulsar a vuestros mercaderes del templo, lacra, ejercito de sanguijuelas que sin importarles nada, famelizan al paciente y honrado pueblo.
No solo dais asco, dais más que asco, enharinados con vuestros códigos morales y éticos que no cumplís.
Sois ruido de promesas que hieden, unos y otros, sin importar vuestro color, los delincuentes y los que consienten y tapan el delito del camarada.
Entended el hartazgo de un pueblo que con tal de librarse de vosotros, el sistema quiere dinamitar.

Sabor a mantequilla

Busque en tus labios con sabor a mantequilla, el ayer con olor a domingo.
A la fresca colonia en el pelo que nos ponían para ir a misa.
Busque el crujir del desvencijado banco de los infantes, donde nos arremolinábamos con el temor de lo enorme y el oloroso boato antiguo.
Busque el pesar del pequeño hurto, que sentíamos gravitar enorme.
Busque el sabor de las galletas a escondidas, el sabor de los roces secretos.
Busque las palabras que atraían la lluvia en el inmenso atrio.
Busque sentir como se clavaba el granito en las desnudas rodillas, mientras rezábamos a las almas que ardían, crepitar de rezos para sanar dolores.
Busque en tus labios el sabor de ayer y solo encontré tu sabor a mantequilla.

viernes, 7 de noviembre de 2014

Distanciamiento

Cifran algunos su éxito en la distancia.
Cifran su éxito algunos en el distanciamiento.
Vieja estrategia de divide y vencerás.
No nos duele el corazón de ultramar.
La distancia hace el olvido.
La lejanía genera indiferencia.
Si quieres hundir un imperio, fragmentalo.
Guerras intestinas, guerras cainitas.
Siembra celos y envidia, y a los lazos de sangre vencerás.