martes, 21 de julio de 2015

Estelas al socaire

Serenidad de león saciado.
Sin hambre no hay perplejidad.
Es la molicie la que anula el asombro.
Tácitamente todo está engendrado.  
Sin palabras domina la mirada insolente. 
Estelas al socaire del cometa más refulgente.            

Volumen

Valgo más que el agua que desplazo.
No tiene volumen mi verbo.
Y su inmersión aunque agita, ningún desalojo provoca.
No ocupa espacio mi alma.
Y aunque no pesa, potentemente tilda y gravita.

domingo, 19 de julio de 2015

Residuales

Siento frío cuando la verdad muda.
Siento frío cuando la verdad es mudable.
Sin pilares no existe orbe.
Como nos van a amparar si no existen pilares.
Demasiado fácil para venderlo como aparatoso.
Es el rédito del trabajo ficticio.
Es el rédito de inflaccionar el trabajo.

Sesgo

"Siento que las buenas acciones pesan tan poco, que tengo que ser pesado para poder equilibrar el fiel de la ciega justicia. Con el justo sesgo, justamente sesgado."
Yoransel de Omatog

El color del cristal

"Por nuestra mirada nos significamos, nuestra mirada no es nada insignificante.
¿De que color es tu cristal? Así me ves y así te veo."
Irsia Carolain Sprimbol

Síndrome de insignificancia

"Síndrome de insignificancia, padecido por el insignificante, por el que se significa derribando el espíritu de la decencia. Cuando nada se tiene que portar se dedica el insignificante a minar lo que aporta el importante."
Dervik Tro´men

El aire orea destrozos

El aire orea los destrozos.
Es la mano del manso deleitoso.
Es esa mano la que hunde portentosos navíos.
Rompiendo trayectorias de cometa con su lengua lisonjera.
Es grande la fuerza del débil.
Que con miel atrapa.
Que con agua y azúcar somete.
Encaramado por las filigranas que engarzan el pectoral de jaspe.
Encaramado por los juicios de desvarío.
Menesteroso que vive de citas.
Y se aúpa cifrando un abolengo infame.
Vuelos vanos que le dan altura.
Vuelos para acomodarse a la rima de la cima.

sábado, 18 de julio de 2015

Me enfado

Me enfado con quien quiero.
De quien quiero todo me enfada.
Es el amor un tormento.
Es estar saciado y tener sed.
Ni contigo, ni sin ti.
Como poder vivir si sin ti muero.
Como poder vivir si estar contigo me mata.
Enfermo de presencia.
Enfermo de ausencia.

Incendios de malvados

Se seca el verdor.
Y la mano incendiaria lo remplaza por el dolor de la ceniza.
Pizarras mordidas por la rapidez del asfalto.
Por el camino por el que huye quien calcina el campo.

Soñadores en un mundo de ruinas

Que cautivadores son los locos.
Cuando los miras no los ves a ellos.
Solo ves en sus seductores estanques.
Lo fácil que es hacer realidad tus sueños.
La fuerza del visionario es irresistible.
Resiste contra la marea de la convención.
Soñadores en un mundo de ruinas.
Ruinas para los que no son soñadores.

Rápido y lento

Voy despacio cuando tengo prisa.
Tengo prisa cuando voy despacio.

Empezar a morir

Cuando nos dicen que vamos a morir, comenzamos a vivir.
Días malgastados en la inconsciencia que es pensar que nuestro tiempo es eterno.

Jugamos a enfermar

Las enfermedades nos puntan con el dedo y nos eligen, 
con un azar calculado, 
con un azar del que somos participes.
Adquirimos papeletas para los sorteos, 
jugamos para que la enfermedad nos toque.

Los pastos negados

Si la belleza fuera consciente del embeleso que provoca, dominaría el mundo desde su candor y esclavizaría al avispado que busca la frescura de unos pastos que por natura le son negados.
No hay mayor placer que gozar entre iguales, cándidos con cándidos, y los avezados embaucadores que aprendan a gozar con sus iguales.

Los pollinos humanos

"No suelo dar miel a los asnos, a los pollinos humanos que no tienen exquisito paladar. Ser una perrigalga es lo que tiene, que aun estando en la más absoluta ruina, sigues manteniendo intacta toda tu clase."
Irsia Carolain Sprimbol