jueves, 14 de febrero de 2019
Si no hay calvario, no hay tormento
Latidos carmesíes, latidos de soberbio cobalto.
Cuidados y atenciones delicadas que nos hacen sentir culpables.
Sin vicisitudes está el que surca el bravo mar, solo.
La soledad es inmensa calma.
No hay bravura en la autosuficiencia.
Paz y felicidad que no demanda ninguna prenda.
Rocas aterciopeladas por el musgo en las que es imposible encallar.
No hay tormento si no hay calvario.
Ebrio sin amor.
Aparte está el que no siente que le falta una parte.
miércoles, 13 de febrero de 2019
Tirma
Cuando la mirada se va, se pierde, se desvanece.
Cuando la rigidez nos vence.
Cuando la frialdad nos cerca.
Cuando el dolor nos vence.
Seres efímeros que jugamos a ser inmortales.
Seres mortales que creemos que no somos efímeros.
La sombra vence a la vida.
Vivir tiene demasiadas sombras.
Adiós Tirma
El infierno hunde sus raíces en las pérdidas.
Desarraigo de afectos.
Desierto sin caricias, sin el beso de mis ángeles.
Cada vez soy menos.
Menguo segun los voy perdiendo.
Mil besos Tirma.
Amor que buscaba mis manos.
Manos que reciben todo tu amor.
Siento hielo en mi alma.
Siento plomo en mi corazón.
Una pérdida más.
Un ángel menos.
Compañera que dormía sobre mi pecho.
Pecho que no volverá a sentir tu calor.
viernes, 8 de febrero de 2019
Mudar hasta dejar de ser
Apuntar muy alto.
Apretar los puños.
Contar las pérdidas.
Los instantes sin fruto.
Los desiertos.
Los días en blanco.
El hambre.
El sueño.
El conformismo.
La sensación de soledad.
La soledad.
El fin.
El olvido.
Mudamos hasta dejar de existir.
Trapos rojos de sangre
Siempre ha salido gratis ofender.
Decapitar Santos.
Mancharse las manos con nivea sangre.
Palomas de la paz ametralladas por baladrones.
Siempre ha sido recurrente en los que ondeaban trapos rojos, hacer brotar la sangre de los pechos de los justos, de los que fueron masacrados por el hecho de profesar una fe.
sábado, 2 de febrero de 2019
Ser
Para los que piensan que me han amedrentado.
Sin un ápice de remordimiento, seguiré con lo que estoy haciendo.
Impresión de perfección que es victoria.
La vida real es intensidad.
No temo vuestras amenazas.
Todo está ya escrito.
Y vuestro odio os matará.
El tiempo para vosotros transcurre en balde.
Deshonrará
"Las Reinas mueren, pero no se llevan a la tumba sus joyas. Siempre habrá algún heredero que luciéndolas las deshonrará."
Irsia Carolain Sprimbol
Dulces entierros
Cuántos dulces entierros tenemos que regalarnos.
Cuánta toxicidad debemos enterrar.
Falsos amigos.
Falsos perfectos.
Señaladores de imperfecciones.
Expertos en desanimar.
Seres que disfrutan añadiendo más granitos de arena, al montón que te terminará de hundir.
Alimañas próximas.
Carias ponzoñosas.
Besos de Judas.
Traidores.
Famélicos envidiosos, que muerden y no comen.
Seres amarillos, pardos, negros.
A quemarropa te dispara el que está cerca.
Manos que te ahogan.
Plomo en las alas del ingenio.
Plañideras bien pagadas.
Escorrentía.
Secarral.
viernes, 1 de febrero de 2019
Célibes
Célibes,
sin pulsiones,
con los instintos domados,
castrados,
castrados por autoimposición.
Elecciones que subliman, las fuerzas que a ninguna parte van.
Satisfacer con demasiada frecuencia es una pérdida de tiempo.
Es un tiempo que resta brío a la vocación.
Nuestros logros están supeditados al control.
Derrochar mengua victorias.
Malgastar malogra el éxito.
Libres,
disponibles,
entregados,
a un pueblo,
a la grey,
a la sangre.
La pasión es un laberinto.
Evitarla es la salvación.
Obreros de la obra común.
Siervos de la comuna.
Sin ataduras, no hay atajos.
Sin pasión todo es rectitud.
Entregados.
Pastores.
Disponibles y dispuestos.
Estar libres es una abrazada bendición.
Borrones
Los borrones afean y no se olvidan.
Los borrones son hitos, mojones en las sendas donde se tropezó al transitar.
Nunca olvido, siempre recuerdo y recordando nunca desando pa recuperar lo afortunadamente perdido.
Vivir es perder, es evitar caer, es levantarse.
Huye del envidioso, como se huye de la peste.
Mis brazos no gustan de abrazar miserias, ni estrechan a miserables.
Mi calor no tiene dueño y muy pronto despeña a la alimaña que busca guarida en mis gracia.
Nada busco, sólo trabajo los talentos que me dio natura, los talentos que paso tras paso, me alcanzaran la gloria.
lunes, 28 de enero de 2019
Con mi Dios, nada me espanta
No eres grande si no tienes enemigos, ser consecuente acarrea enemistades.
Ser abanderado de causas nobles, nos hace blanco de la ira de la marea ingente de los mediocres.
He aprendido a caminar erguido entre escombros, a no sentir las punzadas de los cristales en mis plantas.
El mezquino es tropiezo, es baladrón envidiosos, en rastrera mondonga.
Soy luz en los arrabales y en los encopetados salón llenos de trampas.
Nada temo, no estoy solo, el Rey de la Verdad, siempre me acompaña.
Con mi Dios, nada me hiere.
Con mi Dios, nada me espanta.
Ser abanderado de causas nobles, nos hace blanco de la ira de la marea ingente de los mediocres.
He aprendido a caminar erguido entre escombros, a no sentir las punzadas de los cristales en mis plantas.
El mezquino es tropiezo, es baladrón envidiosos, en rastrera mondonga.
Soy luz en los arrabales y en los encopetados salón llenos de trampas.
Nada temo, no estoy solo, el Rey de la Verdad, siempre me acompaña.
Con mi Dios, nada me hiere.
Con mi Dios, nada me espanta.
El orgullo me impide
Es imposible transitar por la vida sin tropezar con la bajeza moral.
Sin encontrar los socavones de la medianía, del tibio que está siempre equidistante.
Mar de viles, de arrastrados, patéticas chanzas, remedos de una preeminencia moral que nunca lograran.
Es imposible no toparse con ellos, caer en sus zanjas de bruces e intentar salir de esos pozos de miseria, indemne.
Somos las bajas pasiones que albergamos, el no saber embridarlas, somos teatro de aspavientos, calumnias y circo, que hacemos para salvar nuestras campañas. Y digo somos, porque es tentador el camino corto, aunque en mi caso el orgullo me impide cogerlo y culebrear por él.
domingo, 27 de enero de 2019
Espacios angostos
Con demasiada frecuencia los infiernos son angostos, espacios que cercenan todos nuestros movimientos.
Es la cárcel torácica la que embrida la pasión.
sábado, 26 de enero de 2019
Altura
No es fácil ser coronado, es muy fácil perder la conora.
Caminos que cuesta mucho andar y se desandan con suma facilidad.
Es la altura una cota de poder, es el poder un privilegio de la altura.
Esperar no suele ser una forma de conseguir, pelear es el mejor camino para la consecución.
La cárcel de los modales
Temo mi prudencia, mi contención, la educada cárcel de mis modos, de mis modales.
Soy bravo mar embalsado, farallón que frena la indómita riada.
Todo me orisiona y mina, todo se multiplica en mi empeño de anular la escorrentía.
Soy martirio, tortura. Leo y releo el infierno de las frases, escudriño entre los renglones.
Todo hiere, todo lacera, hierros candentes que marcan mi piel, con las cicatrices del tropiezo, por el provocado traspié.
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